Taxonomía de los pasajeros de bus público

ciudadano común. Si bien, una de las co juicios inútiles sobre verdad es una sola: a y el tomate chonto y común y corriente d Taxonomía de los pasajeros de bus público Sy mafaIda90 AeKa6p’1 03, 2010 4 pages Que mataron al más escurridizo y bailarín jefe guerrillero; que un procurador lengüisopa y rezandero destltuyó a la senadora que se toma fotos con la boina sudada de Iván Márquez y habla mal del país ante un grupo de europeos que en secreto se preguntan ¿dónde diablos queda Columbia? que en Venezuela el comandante, con su sudadera tricolor, celebra la victoria en as elecciones, mientras sus opositores también hacen su propia celebración; que el otro presidente vecino, cegado por los gases lacrimógenos, grita «prefiero estar muerto a perder la vida», y así un interminable cúmulo de noticias llegan día a día a los oídos del Swipe to page ora at ochos es emitir man los medios, la se caiga a pedazos recio, el ciudadano te su rutina de telenovela de las 8 y postura de sudadera los domingos. arte de esta rutina es la de montar en buseta, una proeza por la cual, particularmente a los bogotanos, nos deberían regalar cinco días adicionales de sueldo cada mes. Más allá de la adorable clase ransportadora y sus particularidades, dejando de lado que nos toca soportar a los drogadictos convertidos al cristianismo y de demás embaucadores, además de tener que padecer la radio mañanera, valdría la pena ahora hablar de los pasajeros.

Con años de experiencia, batiéndome como un león en el hostil mundo de la buseta, he podido clasificar a algunos de los otros habitantes del oscuro y agreste ecosistema busetero así: Gordo con déficit de motricidad: Es aquel personaje que, gracias a su evidente sobrepeso, en el tránsito por el ya de por sí estrecho corredor del bus, no puede hacer un recorrido nítido sin entrar en mpujones continuos a los demás pasajeros, así vayan sentados.

Si los otros pasajeros van parados y no han desarrollado la suficiente destreza de agarre a la grasosa varilla, es muy probable que tras el paso del gordo, sean arrollados y terminen tendidos en las piernas del pasajero que va sentado o estampillados contra una ventana. Si usted va sentado al lado de un gordo, asegúrese de abrir la ventana para sacar la cabeza y no morir asfixiado.

Oficinista encartada: Pertenecen a esta categoría trabajadoras de oficina (siempre mujeres), que desconociendo las dinámicas de la buseta, pretenden emprender un viaje en hora pico con una artera colgada al hombro, una carpeta en la mano, una sombrilla, ojalá escurriendo, y una loncherita donde llevan un almuerzo que, casi siempre, parece recién preparado por el aroma a cebolla que expele y el calor que emana. Su ubicación en la buseta es muy complicada, pues si van paradas es obligat el calor que emana.

Su ubicación en la buseta es muy complicada, pues si van paradas es obligatorio que alguien más les lleve sus aditamentos o de lo contrario en todo el recorrido terminan paseando por el corredor al ritmo de cada frenada y arrancada ante la imposibilidad de agarrarse, esto sólo si tiene la suerte de o quedar estampillada contra el espacio al lado del conductor donde se ponen las monedas. Anciana enana: Con una estatura que no supera los 1. metros, mujeres de la tercera edad, o cercanas a ella, con voz aguda a quienes siempre el chofer les debe reclamar porque faltan $IOO del pasaje, se caracterizan por quedarse mirando fijamente conversaclones ajenas o simplemente al pasajero que va en el puesto contiguo. Cuando éste se da cuenta de la mirada fija, la mujer esquiva el cruce de miradas y se hace la desentendida, sólo por unos segundos porque al rato repite la rutina.

Al momento e bajarse, es clave que haya alguien en el último puesto, pues la anciana enana nunca alcanza al timbre para anunciar la parada y siempre debe pedir ayuda. Avatar: Entendiendo por Avatar a aquel personaje que mide más de 1. 8 m (estatura que en Colombia ya lo define como gigante), este personaje siempre estará apretado en una buseta.

Si va parado tendrá que hacer lo posible por suprimir su cuello y pegar la cabeza al tronco para que pueda caber, no obstante, al agarrarse de la barilla superior sus codos quedarán flexionados 3Lvf4 que pueda caber, no obstante, al agarrarse de la barilla superior us codos quedarán flexionados y por ende, encima de la cara del pasajero del lado. Si va sentado, a la fuerza tendrá que recortar su fémur para que sus piernas quepan en el reducido espacio del asiento, de lo contrario, el pasajero del puesto de adelante tendré que soportar un recorrido dominado por los rodillazos en la espalda.

Viejo discapacitado: Aunque el medio de transporte más apropiado para un personaje como este sería una ambulancia, la precaria seguridad social de nuestro pais obliga a estos ancianos moribundos a abordar estos vehículos que los aproximan cada vez más a la muerte. Con una pierna llena de clavos, con la adera recién operada 0 15 puntos a la altura del ombligo, el viejo discapacitado debe montar en buseta para acudir a mediocres citas médicas.

Bonustrack Universitario agotado: Son aquellos personajes de jeans entubados y pelo pegado a la cara que creen que su rutina diaria y la tensión de un quiz es tan desgastante como para no poder soportar estar de pie en un Transmilenio, por lo cual deciden sentarse en el espacio de unión de los buses, generando así una aglomeración en las puertas óptima para el próspero negocio de robo de celulares. Si usted conoce más clasificaciones, no dude en hacer su aporte para nutrir esta lista.