Siglo de oro

Siglo de oro gyCuachch OcopaTIR 14, 2016 | 34 pagos ÍNDICE INTRODUCCION—————————————————————–„ CONTENIDO: SIGLO DE Literatura del Siglo de oro en España Teatro — Culminación Épica –6 Lope de Vega: El teat Otros dramaturgos d español – PACE 1 n. Sv. içx to View nut*ge Calderón: los últimos de los clásicos españoles-— El quijote Novelas ejemplares Prosa — Literatura del siglo de oro en ——–4-16 __9-11 Literatura del siglo de oro en Alemania -11-12 Reuchlins Literatura del Siglo de oro en Francia———– — Literatura del sglo de oro en Inglaterra —13-14

William Shakespeare— CONTENIDO: CULTERANISMO Y CONCEP ISMO—— — Culteranismo Conceptismo—— 15-16 –12 –12-13 — 14-18 Cuadro comparativo: Culteranismo y Conceptismo CONCLUSIONES BIBLIOGRAFIA – INTRODUCCION A la época en la que los textos literarios alcanzaron la perfección y llegaron a su máxima belleza se le llamó «Siglo de Oro». El Siglo de Oro no se dió sólo en un país (España comúnmente), si no que también en otros países de Europa. Generalmente se sabe más sobre España porque fue ahí donde hubo mas obras de distintos generos.

Es importante señalar que el Siglo de Oro no hubiera existido sin a aparición de escritores y que escribieron obras que alcanzaron un alto bril n los autores de cada ejemplo la literatura alemana tuvo mucha influencia italiana durante aquellos tiempos. Además los textos de antiguos autores como La Eneida de Virgilio y La divina comedia de Dante Alighieri swieron como inspiracón para los escrltores de la época. Recordemos que, al analizar los textos literarios podemos descubrir los sentimientos del autor al momento de escribirlos.

SIGLO DE ORO La históricamente tan afortunada definición Siglo de Oro fue creada por el célebre erudito y anticuario dieciochesco Luis José Ve ázquez, marqués de Valdeflores (1722-1772), quien la empleó por primera vez en 1754, en su importante y pionera obra crítica Orígenes de la poesía castellana, []aunque para referirse exclusivamente al siglo XVI. Posteriormente la definición se amplió, entendiendo toda la época clásica o de apogeo de la cultura española, esencialmente el Renacimiento del siglo XVI y el Barroco del siglo XVII. ] Para la historiograffa y los teóricos modernos, pues, y ciñéndose a fechas concretas de acontecimientos clave, el «Siglo de Oro» abarca desde la publicación de la Gramática castellana de Nebrija en 1492 hasta la uerte de Calderón en 1681. EL SIGLO DE ORO EN ESPAÑA La culminación Artística. El lapso que se conoce como Siglo de Oro incluyó al período Barroco. La poesía alcanzo sus más altos brillos en manos de Boscán y Garcilaso de la Vega quienes adoptaron el soneto de los italianos Dante y Petrarca.

Por otro lado, en el siglo XVII se produce la síntesis de las dos tendencias imperantes en el teatro hasta ese momento; la popular, de raigambre medieval, y la intelectual, de origen rena entonces un teatro tipo nacional, con escenograffa de origen renacentista. Nace entonces un teatro tipo nacional, on escenografías locales aunque rudimentarias. Tres autores son significativos de este período: Lope de Vega, Tirso de Molina y Calderón de la Barca.

España produjo en su edad clásica algunas estéticas y géneros literarios característicos que fueron muy influyentes en el desarrollo ulterior de la Literatura Universal. Entre las estéticas, fue fundamental el desarrollo de una realista y popularizante tal como se había venido fraguando durante toda la Edad Media peninsular como contrapartida critica al excesivo, caballeresco y nobilizante idealismo del Renacimiento: se crean eneros tan naturalistas como el celestinesco (Traglcomedia de Calisto y Melibea de Fernando de Rojas, Segunda Celestina de Feliciano de Silva, etc. , la novela picaresca (Lazarillo de Tormes anónimo, Guzmán de Alfarache, de Mateo Alemán, Estebanillo González), o la proteica novela polifónica moderna (Don Quijote de la Mancha), que Cervantes definió como «escritura desatada». A esta vulgarización literaria corresponde una subsecuente vulgarización de los saberes humanísticos mediante los populares géneros de las misceláneas o silvas de varia lección, leidísimas y traducidisimas en toda Europa, y cuyos autores más importantes on Pero Mexía, Luis Zapata, Antonio de Torquemada, etcétera.

A esta tendencia anticlésica corresponde también la fórmula de la comedia nueva creada por Lope de Vega y divulgada a través de su Arte nuevo de hacer comedias en este tiempo (1 609): una explosión inigualable de creatividad dramática acompañó a Lope de Vega y sus discípulos, que quebrantaron como él las unidades aristotélicas de acción, tiempo y de Vega y sus discípulos, que quebrantaron como él las unidades aristotélicas de acción, tiempo y lugar: todos los autores dramáticos de Europa acudieron luego al teatro clásico spañol del Siglo de Oro en busca de argumentos y como una rica almoneda y cantera de temas y estructuras modernas cuyo pulimento les ofrecerá obras de carácter clásico.

Muchos de estos temas provenían de la rica tradición medieval pluricultural, árabe y hebrea, del Romancero y de la imprenta italianizante de la cultura española, a causa de la presencia política del reino español en la península itálica durante largos siglos. Por otra parte, géneros dramáticos como el entremés y la novela cortesana introdujeron también la estética realista en los corrales de comedias, y aun la comedia de capa y espada tenia su epresentante popular en la figura del gracioso. A esta corriente de realismo popularizador sucedió una reacción religiosa, nobiliaria y cortesana de signo Barroco que también hizo notables aportaciones estéticas, correspondiendo a una época de crisis poltica, económica y social.

Al lenguaje claro y popular del siglo WI, el castellano vivo, creador y en perpetua ebullición de Bernal Diaz del Castillo y Santa Teresa sucederá, aun siendo cronológicamente más reciente, la lengua más oscura, enigmática y cortesana del Barroco. La lengua literaria del Barroco se enrarece con las estéticas el Conceptismo y del Culteranismo, cuyo fin era elevar lo noble sobre lo vulgar, intelectualizando el arte de la palabra; la literatura se transforma en una especie de escolástica, en un juego o un espectáculo y las producciones moralizantes y por extremo ingeniosas de un Francisco de Quevedo y u s OF ingeniosas de un Francisco de Quevedo y un Baltasar Gracián distorsionan la lengua, aportándole más flexibilidad expresiva y una nueva cantera de vocablos (cultismos).

El lúcido Calderón crea la fórmula del auto sacramental, que supone la vulgarización antipopular y esplendorosa de la Teología, en deliberada antítesis on el entremés, que, sin embargo, todavía sigue teniendo curso; pues estos autores todavía son deudores y admiradores de los autores del siglo XVI, a los que imitan conscientemente, aunque para no repetirse refinan sus fórmulas y estilizan cortesanamente lo que otros ya crearon, de forma que se perfeccionan temas y fórmulas dramáticas ya usadas por otros autores anteriores. A fines del selo XVI se desarrolla notablemente la Mística (Juan de la Cruz, San Juan Bautista de la Concepción, San Juan de Ávila, Santa Teresa de Jesús) y la Ascética (fray Luis de León, fray Luis e Granada), para entrar en el siglo XVII en decadencia tras una última corriente innovadora, el Quietismo de Miguel de Molinos.

Poesía España experimentó una gran ola de italianismo que invadió la literatura y las artes plásticas durante el siglo WI y que es uno de los rasgos de identidad del Renacimiento. Garcilaso de la Vega, Juan Boscán y Diego Hurtado de Mendoza introdujeron el verso endecasllabo italiano y el estrofismo y los temas del Petrarquismo; Boscán escribió el manifiesto de la nueva escuela en la Epístola a la duquesa de Soma y tradujo El cortesano de Baltasar de Castiglione en perfecta prosa castellana; contra estos se levantaron nacionalistas como Cristóbal de Castillejo o Fray Ambrosio Montesino, partidario Ambrosio Montesino, partidarios del octosílabo y de las coplas castellanas, pero igualmente renacentistas.

En la segunda mitad del siglo XVI ambas tendencias coexistieron y se desarrolló la ascética y la mística, alcanzándose cumbres como las que representan San Juan de la Cruz, Santa Teresa y Fray Luis de León; el petrarquismo siguió siendo cultivado por autores como Fernando de Herrera, y un grupo de jóvenes nuevos autores omenzó a desarrollar un Romancero nuevo, a veces de tema morisco: Lope de Vega, Luis de Góngora y Miguel de Cervantes; el mejor poema de épica culta en español fue compuesto en esta época por Alonso de Ercilla, La Araucana, que narra la conquista de Chile por los españoles, y entre las figuras excepcionales de la lírica figuran poetas tan interesantes como Francisco de Aldana, al lado de figuras como Andrés Fernández de Andrada, los hermanos Bartolomé y upercio Leonardo de Argensola, Francisco de Rioja, Rodrigo Caro, Baltasar del Alcázar o Bernardo de Balbuena. Posteriormente, durante el siglo WII, la expresión literaria fue ominada por los movimientos estéticos del conceptismo y del culteranismo, expresado el primero en la poesía de Francisco de Quevedo y el segundo en la lirica de Luis de Góngora.

El conceptismo se distinguía por la economía en la forma, a fin de expresar el máximo significado en un mínimo de palabras; esta complejidad se expresaba sobre todo en paradojas y elipsis. El culteranismo, por el contrario, extendía la forma de un significado mínimo y se distingu[a por la complejidad sintáctica, por el uso constante del hipérbaton, que hace muy difícil la lectura, y por complejidad sintáctica, por el uso constante del hipérbaton, que ace muy difícil la lectura, y por la profusión de los elementos ornamentales y culturalistas en el poema, que debía descifrarse como un enigma. Ambos parecen sin embargo las caras de una misma moneda que intentaba aquilatar la expresión para hacerla más difícil y cortesana.

Luis de Góngora atrajo a su estilo a poetas importantes de personalidad muy acusada, como el Conde de Villamediana, Gabriel Bocángel, sor Juana Inés de la Cruz o Juan de Jáuregui, mientras que el conceptismo tuvo a seguidores más templados, como el Conde de Salinas o imbuidos de un culto casticismo, como Lope de Vega o Bernardino de Rebolledo. poesía épica Otro género de enorme proyección en la España de la segunda mitad del siglo XVI fue la épica culta, de imitación italiana. La epopeya se inspiró sobre todo en el Orlando furioso (1516) de Ariosto y Jerusalén liberada de Tasso (1580). Este género se escribió por lo general en octavas reales con un número de cantos que oscilaba de 12 a 24. La obra más famosa en este género es, sin duda, La Araucana de Alonso de Ercilla. Ercilla (1533-1594), noble que luchó en la conquista de Chlle, tema de la epopeya.

Teatro En 1570 aparecen los «corrales de comedias» que independizan las representaciones teatrales del ámbito religioso. Las obras principiaron a tener autor, por lo que en su producción se destacaron Juan de Encina, Torres Navarro y Gil Vicente como los precursores de Lope de Vega, Tirso de Molina y Calderón de la Barca, quienes conformaron la esencia del teatro clásico español. Este teatro se destaca por: Constituir una recreación de la tragedia griega clásica. Seguir el teatro se destaca por: Seguir el pensamiento de Aristóteles. Buscar en las obras un contenido referido a las realidades propias del pueblo español. Poseer un dialogo parco, pues apunta a la narración más que a la expresividad. Distinguir entre el teatro religioso y popular.

En este periodo encontramos dos tipos de manifestaciones del teatro: El teatro religioso, de origen medieval, impulsado fundamentalmente por los móviles de la Contrarreforma, que intentaba captar la mente y la atención de los espectadores por medio de los sentidos, con el objetivo de que quien lo presenciaba se sintiera profundamente identificado con el catolicismo. El teatro popular que resulto del surgimiento de la comedia nacional española, cuyas características principales fueron la mezcla de elementos trágicos y cómicos, la introduccion en la representación de cantos y bailes populares y la utilización de xpresiones en prosa o en verso. Se buscó hacer un teatro del gusto de la época, incorporando personajes populares, dándole a la trama un cierto carácter novelesco; se crea el personaje llamado «el gracioso». Los temas preferentes: el amor, los celos, la justicia, la muerte, asuntos religiosos o festivos. Sus conceptos básicos fueron establecidos por Lope de Vega.

Lo mismo que la novela, el teatro alcanza su máximo esplendor en la edad barroca, cuando Lope de Vega fija la nueva estructura de la comedia (con los tres actos y la polimetría para las distintas escenas) y crea el tipo del gracioso o «figura de onaire». Sus innovaciones dramáticas las seguirán, entre otros Tirso de Molina, Guillen Castro, Mira de Amescua y Ve innovaciones dramaticas las seguirán, entre otros Tirso de Molina, Guillen Castro, Mira de Amescua y Velez de Guevara, hasta llegar Calderon de la Barca. Lope de Vega. El teatro nacional Lope de Vega fue llamado por Cervantes «monstruo de la naturaleza» por su asombrosa capacidad creativa y su excepcional vitalidad.

Nacido en Madrid en 1562, se suceden en su vida las aventuras amorosas (desde las relaciones con Elena Osorio hasta la pasión por Marta de Nevares, pasando por los matrimonios on Isabel de Urbina y con Juana Guardo), lo que no le impide participar en expediciones militares como la de la Invencible y en polémicas literarias y teatrales. En su obra no dramática hay el verso y la prosa. Superior al verso narrativo La Dragontea y de La Gatomaquia en su poesía lírica, reunida en títulos como Rimas, Rimas sacras y Rimas humanas y divinas del licenciado Tomé de Burguillos, o mezclada con la prosa de la Arcadia (novela pastoril), de El peregrino en su patria o de La Dorotea, o intercalada en sus comedias.

En esta abundancia de versos están todos los registros: l del poeta culto, afectado de barroco; el del poeta popular, con todos los tipos del cantar popular, y del poeta que funde lo culto y lo popular (Romancero Artístico). A la espontaneidad de su inspiración se une en Lope un sobrecargado repertorio temático. De la prosa lo que más se ha valorado es la «acción en prosa», en cinco actos, de La Dorotea (1 632), de larga gestación, estimada como un resumen final de toda su creación literaria. El teatro clásico español lo forja Lope de Vega en la teoría (expuesta en Arte nuevo de hacer comedias, 1609) y en la práctica. Exposición, enredo y desenlace so