Santa Juana de Arco

Santa Juana de Arco gyjacquclincluusld I $eopa,1R 14, 2016 4 pagcs Fecha de conmemoración: 30 de mayo Biografía: Nació en el año 1412 en Donremy, Francia. Su padre se llamaba Jaime de Arco, y era un campesino. A los catorce años la niña Juana empezó a sentir unas voces que la llamaban. Al pnncpio no sabía de quién se trataba, pero después empezó a ver resplandores y que se le aparecían el Arcángel San Miguel, Santa Catalina y Santa Margarita y le decían: «Tú debes salvar a la nación y al rey».

Por temor no contó a nadie nada al principio, pero espués las voces fueron insistiéndole fuertemente en que ella, pobre niña campesina e ignorante, estaba destinada para salvar la nación y al rey y entonces contó a sus familiares y vecinos. Las primeras veces las gentes na le cre e ron ero después ante la insistencia de las voc ora la llevó a donde el co nd Ella le dijo que Dios el militar no le creyó embargo unos mese ar n, un tío suyo se la ciudad vecina. mensaje al rey. pero ara su casa.

Sin presentarse ante el comandante y este ante la noticia de una derrota que la niña e había profetizado la envió con una escolta a que fuera a ver al rey. Llegada a la ciudad pidi Swlpe to vlew next page pidió poder hablarle al rey. Este para engañarla se disfrazó de simple aldeano y colocó en su sitio a otro. La joven llegó al gran salón y en vez de dirigirse hacia donde estaba el reemplazo del rey, guiada por las «voces» que la dirig(an se fue directamente a donde estaba el rey disfrazado y le habló y le contó secretos que el rey no se imaginaba.

Esto hizo que el rey cambiara totalmente de opinión acerca de la joven campesina. Juana le pide al monarca ue le conceda a ella el mando sobre las tropas. Y el rey la nombra capitana. Animados por la joven capitana, los soldados franceses lucharon como héroes y expulsaron a los asaltantes y liberaron Orleans. Luego se dirigieron a varias otras ciudades y las liberaron también. Después de sus resonantes victorias, obtuvo Santa Juana que el temeroso rey Carlos VII aceptara ser coronado como jefe de toda la nación.

Muchos empleados de la corte del rey tenían celos de que ella llegara a ser demasiado importante y empezaron a hacerle la guerra. Faltaba algo muy importante n aquella guerra nacional: conquistar a Paris, la capital, que estaba en poder del enemigo. Y hacia allá se dirigió Juana con sus valientes. Pero el rey Carlos VII, por envidias y por componendas con los enemigos, le retiró sus tropas y Juana fue herida en la batalla y hecha prisionera por los Borgoñones.

Los in retiró sus tropas y Juana fue herida en la batalla y hecha prisionera por los Borgoñones. Los ingleses la hicieron sufrir muchísimo en la cárcel. Las humillaciones y los insultos eran todos los dias y a todas horas, hasta el punto que Juana llegó exclamar: «Esta cárcel ha sido para mí un martirio tan cruel, como nunca me había imaginado que pudiera serlo». pero seguía rezando con fe y proclamando que sí había oído las voces del cielo y que la campaña que había hecho por salvar a su patria, había sido por voluntad de Dios.

En ese tiempo estaba muy de moda acusar de brujería a toda mujer que uno quisiera hacer desaparecer. Y asi fue que los enemigos acusaron a Juana de brujería, diciendo que las victorias que había obtenido era porque les había hecho brujerías a los Ingleses para poderlos derrotar. Ella apeló al Sumo Pontífice, pidiéndole que fuera el Papa de Roma el que la juzgara, pero nadie quiso llevarle al Santo Padre esta noticia, y el tribunal estuvo compuesto exclusivamente por enemigos de la santa.

Y aunque Juana declaró muchas veces que nunca había empleado brujerías y que era totalmente creyente y buena católica, sin embargo la sentenciaron a la más terribles de las muertes de ese entonces: ser quemada viva. Encendieron una gran hoguera y la amarraron a un poste y la quemaron lentamente. Murió rezando y su m 3Lvf4 lentamente. Murió rezando y su mayor consuelo era mirar l crucifijo que un religioso le presentaba y encomendarse a Nuestro Señor.

Invocaba al Arcángel San Miguel, al cual siempre le había tenido gran devoción y pronunciando por tres veces el nombre de Jesús, entregó su espíritu. Era el 29 de mayo del año 1431. Tenía apenas 19 años. Varios volvieron a sus casas diciendo: «Hoy hemos quemado a una santa». 23 años después su madre y sus hermanos pidieron que se reabriera otra vez aquel juicio que se había hecho contra ella. Y el Papa Calixto III nombró una comisión de juristas, los cuales declararon que la sentencia e Juana fue una injusticia.

El rey de Francia la declaró inocente y el papa Benedicto XV la proclamó santa. ¿Cómo llegó a ser santa? Esta santa a los 17 años llegó a ser heroína nacional y mártir de la religión Datos: 1 . Cada sábado la niña Juana recogía flores del campo para llevarles al altar de Nuestra Señora. 2. Era tan buena y bondadosa que todos en el pueblo la querían. 3. Juana no luchaba ni hería a nadie, pero al frente del ejército iba de grupo en grupo animando a los combatientes e infundiéndoles entusiasmo y varias veces fue herida en las batallas.