Libros Helena Petronila Blavatsky ISIS SIN VELO

HE ENA PETROVNA BLAVATSKY ISIS SIN VELO CLAVE DE LOS MISTERIOS DE LA CIENCIA Y TEOLOGAANTIGUA Y MODERNA OBRA COMPLETA EN CUATRO TOMOS TOMO autora dedica esta obra a la SOCIE-DAD TEOSFICA. Fundada En el ao 1875, en Nueva York, para estudiar las materias de que se trata. NOTA DEL EDITOR Isis Velo es una obra que hemos deseado editar hace aos, pero que por circunstancias sobradamente conocidas por todos, solamente ahora podemos realizar en Espaa.

Consultada la opinin de eruditos en Teosofa, estos han coincidido en que la edicin realizada en Barcelona en el ao 1912, cuya traduccin se ebe a Federico Climent Terrer, es la mejor versin en idioma espaol. Haciendo nuestras dichas opiniones, hemos aprovechado Swpe to page ese texto, que repro PAGF 1 or21g8 edicin. Agradecemo bli la gentileza de haber s facil seores Eugenio V. Oli desinteresada colabo te en la presente ad Teosfica Espaola plar. As como a los Pal por la sforzado tesn que pusieron para mantener el fuego sagrado de la resurgida Sociedad -reosfica Espaola.

PRLOGO DEL TRADUCTOR Siete lustros hace que la cofundadora de la Sociedad Teosfica public esta obra, y todava exhalan sus pginas el aroma de sinceridad en que embebi su pluma. Durante los treinta y cinco aos transcurridos desde entonces, ha evolucionado el pensamiento occidental hasta el extremo de confirmar gran nmero de los vaticinios que con maravillosa intuicin formul Blavatsky respecto al porveni porvenir de la ciencia y de la teologa. Por una parte, las academias y universidades han cejado en sus empeos materialistas, y por otra, las iglesias de todas las confesiones han mitigado no poco las crudezas de la intolerancia religiosa.

As es que desde este punto de vista y en cuanto a su aspecto polemstico, resulta hoy ISIS SIN VELO algn tanto anticuada, pero o por ello decrece su mrito, antes bien se acrecienta al considerar el triunfo cada vez ms decisivo de las ideas sustentadas por la ilustre tesofa frente al escepticismo dominante en la poca en que se vali de su pluma como de ariete para batir brecha en las hasta entonces inexpugnables murallas del materialismo cientfico.

Con todo, hay en esta obra pasajes enteros de inmarcesible frescura y perpetua actualidad que entraan copiosas enseanzas, igualmente valederas para el tesofo convencido que para el principiante vido de conocimientos sobre qu fundamentar sus orientaciones mentales.

La prodigiosa rudicin que en el transcurso de la obra alardea sin arrogancias ni presunciones el abnegado apstol del espiritualismo trascendental, nos ofrece inagotable acopio de datos, fechas, citas, referencias, pruebas documentales y dems elementos de razonadora investigacin que sin hiprbole puede considerarse como el arranque y punto inicial de la Ilteratura teosfica contempornea.

Elena Blavatsky golpe con su mgica pluma la dura roca del materialismo que orgullosamente se ergua en el desierto de la ciencia atea, y de las entraas de tan rida pea brotaron las Impidas y salutferas aguas del oculto manantial en que, sin temor al fango e la supersticin ni a 20F2198 salutferas aguas del oculto manantial en que, sin temor al fango de la supersticin ni al cieno del fanatismo, apagan sus ansias de verdad y su sed de conocimiento cuantos se abrasaban entre las ascuas del dogmatismo a la par teolgico y cientfico.

Los descubrimientos realizados por las ciencias experimentales desde la primera edicin de esta obra, han corroborado plenamente la coexistencia del espritu y de la materia, de la vida y de la forma en odas las manifestaciones del universo, tal como desde los orgenes de la raza humana ensearon los iniciados en la sabidura esotrica.

Precisamente, el tema dominante en ISIS SIN VELO es el reiterado cotejo de la ciencia antigua con las especulaciones modernas para demostrar, segn demuestra cada da ms incontrovertiblemente el progreso de los tiempos, que toda teora, toda hiptesis, toda novedad atribuida a los modernos tuvo su precedente invencin entre los antiguos.

La arqueologa, la lingstica y la mitologa comparada aducen diariamente nuevas y ms que sobradas pruebas de los conocimientos cientficos de aquellas civilizaciones, cuyo espritu sigui flotando en el ambiente de la humanidad durante los prolongados perodos en que estuvo clipsada la verdad por las tinieblas de la ignorancia. En cuanto al ordenamiento de la obra, no la encontrar el lector sujeta al plan rgidamente cuadriculado de los expositores, porque se escrlbi en das de acerba lucha cuyos fragores no podan dar al nimo la sosegada placidez que requiere el eslabonado enlace de las materias.

Pero entre la aparente incoherencia de los temas, palpita la sinceridad de un espritu crtico de insuperable poten aparente incoherencia de los temas, palpita la sinceridad de un espritu crtico de insuperable potencia que suaviza el rigor inflexible de la Igica con la dctil amenidad de la stira, y rremetiendo gallardamente contra el adversario, le hiere con sus propias armas.

Por lo que atae a la traduccin, no hemos alterado en lo ms mnimo el pensamiento de la autora, cuyos conceptos quedan fielmente vertidos con el mismo espritu e intencin del original, aunque acomodando la forma a la ndole peculiar de nuestro idioma, de modo que las ideas no aparezcan envueltas en intiles amplificaciones que dificultaran su comprensin. Al efecto hemos libado, por decirlo as, en el texto ingls, el pensamiento de la autora prrafo por prrafo, para expresarlo despus lo ms clara y conclsamente poslble en el idloma de la versin, como SI las ideas sumieran nueva forma expresiva sin el ms leve detrimento de su prstina originalidad.

FEDERICO CLIMENT TERRER. PREFACIO La obra que sometemos al juicio pblico es fruto de nuestro trato con los Adeptos orientales y del estudio de su ciencia. La dedicamos a cuantos estn dispuestos a aceptar la Verdad, doquiera que la encuentren, y a defenderla sin temor a vulgares preocupaciones. Su objeto es ayudar al estudiante a descubrir los principios vitales que subyacen en los antiguos sistemas filosficos. Este libro es slncero. Hemos procurado que en resplandezca siempre la justicia, junto a la verdad expuesta sin mala intencin ni idea reconcebida.

Nos mostramos inexorables frente al error entronizado y no guardamos la ms mnima consideracin a la autoridad usurpada. Reclamamos para el pasado 40F2198 guardamos la ms mnima consideracin a la autoridad usurpada. Reclamamos para el pasado el honor de sus ejecutorias que se le neg desde hace mucho tiempo exigimos la restitucin de prestadas vestiduras y vindicamos reputaciones tan calumnladas como gloriosas. En este espritu de crtica estn considerados los cultos y credos religiosos y las hiptesis cientficas.

Hombres, partidos, sectas y escuelas son efmeras de un da. Tan slo la VERDAD, asentada en diamantina roca, es eterna y suprema. No creemos en magia alguna que trascienda a la capacidad de la mente humana, ni en milagro alguno, divino o diablico, si por tal se entiende la transgresin de las eternas leyes naturales. No obstante, aceptamos la opinin del sabio autor de Festus cuando dlce que el corazn humano no se ha revelado todava completamente a s mismo ni hemos abarcado ni siquiera comprendido la amplitud de sus poderes.

Ser exagerado creer que el hombre pueda desplegar nuevas facultades sensitivas y relacionarse mucho ms ntimamente con la naturaleza La Igica de la evolucin nos lo dir si la llevamos hasta sus legtimas conclusiones. Si en la ‘nea ascendente, desde el vegetal o el molusco hasta el hombre ms perfecto, ha evolucionado el alma y adquirido sus elevadas facultades intelectuales, no ser irrazonable inferir y creer que tambin en el hombre se est desenvolviendo una facultad perceptiva que le permita indagar hechos y verdades ms all de los Imites de nuestra ordinaria percepcin.

As no vacilamos en admitir con Biff, que lo esencial es siempre lo mismo, ora procedamos cercenando hacia dentro el mrmol para descubrir la estatua oculta en su masa, ora ra procedamos cercenando hacia dentro el mrmol para descubrir la estatua oculta en su masa, ora hacia fuera levantando piedra sobre piedra hasta terminar el templo. Nuestro NUEVO resultado no es ms que una idea antigua. La Itima eternidad encontrar en la primera su alma gemela.

Hace aos, cuando en mi primer viaje por Oriente visit sus desiertos santuarios, me preocupaban dos cuestiones que sin cesar opriman mi mente Dnde est, QIJIN y QU es DIOS Quin vio jams el ESPRITIJ inmortal del hombre, para asegurar la inmortalidad humana Precisamente cuando con ms ansia pretenda resolver tan embarazosos roblemas, trab conocimiento con ciertos hombres que por sus misteriosos poderes y profunda ciencia merecen, sin disputa alguna, el callficativo de sabios de Oriente.

Vlva atencln prest a sus enseanzas. Me dijeron que, combinando la ciencia con la religin, pueden demostrarse la existencia de Dios y la inmortalidad del espritu humano tan fcilmente como un postulado de Euclides. Por vez primera adquir la seguridad de que la filosofa oriental slo cabe en la fe absoluta e inquebrantable en la omnipotencia del Yo inmortal del hombre. Aprend que esta omnipotencia procede del parentesco del espritu del hombre con Dios o Alma Universal. ste, dicen ellos, slo puede demostrarlo aqul.

El espritu del hombre es prueba del Espritu de Dios, como una gota de agua es prueba de la fuente de donde procede. Si a un hombre que nunca haya visto agua, le decs que existe el ocano, deber creerlo por la fe o rechazarlo por completo. Pero dejad que caiga una gota de agua en su mano, y ya tendr un hecho, del cual infiera lo dems, y podr luego que caiga una gota de agua en su mano, y ya tendr un hecho, del cual infiera lo dems, y podr luego comprender poco a poco la existencia de un ocano ilimitado e insondable.

La fe ciega dejar de er una necesldad para l, pues la habr sustituido con el CONOCIMIENTO. Cuando un hombre mortal despliega facultades inmensas, domina las fuerzas de la naturaleza y dirige la vista al mundo del espritu, la inteligencia reflexiva queda abrumada por la conviccin de que si a tanto alcanza el Yo espiritual de un hombre, las facultades del ESPRITU PADRE han de ser comparativamente tan inmensas en magnitud y potencia como el ocano respecto a una simple gota de agua. Ex nihilo nihil fit.

Demostrad la existencia del alma humana por sus maravillosas facultades y demostraris la existencia de Dios En nuestros estudios, prendimos que los misterios no son tales y nos cercioramos de la realidad de nombres y lugares que los occidentales diputan por fabulosos. Devotamente nos dirigamos en espritu al interior del templo de Isis, en Sais, para levantar el velo de la que fue, es y ser para mirar a travs de la desgarrada cortina del Sancta Sanctorum en Jerusalem y a interrogar a la misteriosa Bath-Kol en las criptas del sagrado edificio.

La Filia-Vocis, la hija de la voz divina, responda tras el velo desde el propiciatorio (1), y la ciencia, la teologa y toda hiptesls humana nacida de conocimientos mperfectos, perdan para siempre ante nuestros ojos su carcter autoritario. El Dios vivo habl por medio del hombre su nico orculo. Estbamos satisfechos. Semejante saber es inapreciable y slo ha permanecido oculto para quienes lo desdeaban, satisfechos. Semejante saber es inapreciable y slo ha permanecido oculto para quienes lo desdeaban, ridiculizaban o negaban.

De estos recibimos crticas, censuras y quizs hostilidad, aunque ninguno de los obstculos encontrados en nuestro carmno surge de la validez de las pruebas ni de la autenticidad de hechos histricos ni de la falta de sentido cornn de aquellos a quienes nos emos dirigido. El pensamiento moderno va impelido hacia el liberalismo, tanto en religin como en ciencia. Se acerca el da en que los reaccionarios resignen la desptica autoridad que durante tanto tiempo disfrutaron y ejercieron sobre la conciencia pblica.

Cuando el Papa anatematiza la libertad de la prensa y de la palabra, la supremaca del poder civil y la enseanza laica (2), el portavoz de la ciencia del siglo dieclnueve, Tyndall, le responde diciendo Las posiciones de la ciencia son inexpugnables y hemos de libertar del dominio teolgico las teoras cosmolgicas No es por lo tanto difcil de prever el final. Siglos de esclavitud no logran helar la sangre del hombre, alrededor del ncleo de la fe ciega y el siglo XIX es testigo de los esfuerzos del gigante para romper las cuerdas de los liliputienses y andar por sus pies.

Las mismas comuniones protestantes de Inglaterra y Amrica, ocupadas ahora en revisar el texto de sus Orculos, habrn de demostrar el origen y el valor de este texto. Acaban ya los tiempos en que el dogma dominaba al hombre. Esta obra es, por lo tanto, un alegato en pro de que la filosofa hermtica y la antigua y universal Religin de la Sabidura son la nica clave posible de lo Absoluto en ciencia y teologa. En pr universal Religin de la Sabidura son la nica clave posible de lo Absoluto en ciencia y teologa.

En prueba de que no se nos oculta la dificultad de nuestra empresa, decimos desde luego que no ser extrao que los sectarios arremetan contra nosotros. Los cristianos vern que ponemos en tela de juicio la pureza de su fe. Los cientficos advertirn que medimos sus presunciones con el mismo rasero que las de la Iglesia romana, y que, en ciertos asuntos, preferimos a los sabios y filsofos del mundo antiguo. Los sabios postizos nos atacarn furiosamente desde luego.

Los clericales y librepensadores vern que no admitimos sus onclusiones, sino que queremos el completo reconocimiento de la Verdad. Tambin tendremos enfrente a los literatos y autoridades que ocultan sus creencias ntimas por respeto a vulgares preocupaciones. Los mercenarios y parsitos de la prensa, que prostituyen su poderosa eficacia y deshonran tan noble profesin, se burlarn fcilmente de cosas demasiado sorprendentes para su inteligencia, pues dan ms valor a un prrafo que a la sinceridad.

Algunos criticarn honradamente los ms con hipocresa pero nosotros dirigimos la vista al porvenir. La lucha entre el partido de la conciencia pblica y el de la reaccin ha esarrollado una saludable tnica de pensamiento, que en ‘timo resultado determinar el triunfo de la verdad sobre el error. Lo repetimos de nuevo. Trabajamos para el alboreante porvenir. Y al considerar la acerba oposicin que ha de darnos en rostro, creemos que el mejor mote para nuestro escudo, al entrar en el palenque, es la frase del gladiador romano Ave Csar Morituri te salutant. l palenque, es la frase del gladiador romano Ave Csar Morituri te Nueva York, Septiembre de 1877. – – -00000000000000- – —– -NOTAS PREFACIO 1) Lightfoot asegura que esta voz, tenida antiguamente por estimonio del cielo, se deba al arte mgico. Este Itimo trmino se usa como expresin supersticiosa, porque ha sido y es todava mal comprendido. El objeto de esta obra es corregir las errneas, en lo que se refiere al arte mgico. Encclica opiniones de 1864.

Fragmentos de Ciencia ANTE EL VELO Juan. Arbolemos en los muros nuestras ondulantes Banderas. Rey Enrique VI. Act. IV. He consagrado mi vida Al estudio del hombre, de su destino y de su felicidad. BUCHANAN, M. D. , Bosques de Conferencias sobre Antropologa. Segn se nos dice, hace diecinueve siglos que la divina luz del cristianismo disip las tinieblas del paganismo, y os siglos y medio que la refulgente Impara de la ciencia moderna empez a iluminar la obscura ignorancia de los tiempos.

Se afirma que el verdadero progreso moral e intelectual de la raza se ha realizado en estas dos pocas. Que los antiguos filsofos eran suficientemente sabios para su tiempo, pero poco menos que iletrados en comparacin de nuestros modernos hombres de ciencia. La moral pagana bast a las necesidades de la inculta antigedad, hasta que la luminosa Estrella de Bethlehem mostr el camino de la perfeccin moral y allan el de la salvacin. En la Antigedad, el embrutecimiento era regla, la virtud y el espiritualismo e la ngg