La narracion

LA NARRACIÓN Narrar es relatar sucesos o hechos que se producen, normalmente, en el transcurso del tiempo. La narración es, pues, la forma de expresión más adecuada para contar los sucesos, reales o imaginarios, que acontecen en el tiempo y que se van sucediendo en un orden cronológico. La narración quizá sea la forma de expresión más primaria. De hecho, en la lengua hablada, es la más usada, porque lo habitual en la conversación normal es contar cosas.

En cuanto a su uso literario, la narración es, junto con la descripción, la forma de expresión genuinamente iteraria y es el constituyente esencial de la novela, del cuento, de la historia, de los numerosos poemas narrativos que existen en la literatura, etc. Esto demuestra, además, que la narración puede darse lo mismo en prosa ue en verso_ A untemos, finalmente, que lo normal en un OF15 descripción y el diálo de , p tienen una importan decis• al autor, en muchos rasgos físicos o psíqu palabras (diálogo). alterne con la forma de expresión s.

Ello obligará or medio de sus vés de sus propias En toda narración intervienen tres elementos fundamentales: 1. La materia narrada; es decir, los hechos que se nos relatan y as circunstancias que los determinan, así como su fijación en el tiempo y en el espacio. 2. El narrador y el punto de vista que adopta ante la materia narrada: narrador omnisciente (lleva todo el peso del relato, conoce hasta los detalles más insignificantes de sus personajes e interviene constantemente en el relato con aclaraciones, acotaciones, etc. ; narrador-protagonista (actúa en primera persona, porque es al mismo tiempo el protagonista de los hechos que narra y adopta, por tanto, la forma autobiográfica); narrador-obsewador (deja actuar a los personajes, sin intervenir directamente en el relato sin anticipar nada de su comportamiento); narrador-testigo (cuenta los hechos como si se tratara de un personaje secundario de los mismos). 3.

Los procedimientos narrativos; es decir, los recursos técnicos de los que se vale el narrador para contar los hechos: la ordenación del relato (si sigue un orden natural —introducción, nudo y desenlace—, invierte ese orden o comienza «in media res», es decir, en el punto culminante de la acción); la perspectiva temporal o tiempo narrativo desde el que se nos cuentan los hechos (cronológico, secuencial, de continuos saltos del presente al pasado, etc. ; la verosimilitud narrativa, etcétera.

El texto Vamos a comprobar, ahora, las características de la narración a partir del análisis de un fragmento de la novela, San Camilo, 1936 de Camilo José Cela. El texto nos presenta lo que le sucedió a Miguel Mercader: casi pierde la vida en una pelea entre dos grupos políticos. Esta anécdota tan simple, sin embargo, se narra con una evidente complejidad. Señalemos los elementos que intervienen en el relato: 1. Un narrador, mezcla de narrador omnisciente y narrador- testigo, el autor, que cuenta los hechos y que presenta la primera línea narrativa. e cuenta los hechos y que presenta la primera linea narrativa. 2. Un segundo narrador, el protagonista, que cuenta asimismo los hechos, pero desde una perspectiva más subjetiva. 3. Aparición de un segundo personaje, el periodista del Heraldo, quien, a través del diálogo con Miguel Mercader, va a permitir que el autor presente, una vez más, los hechos (tercera línea narrativa) acudiendo a la forma dialogada. Haga ahora que sus alumnos lean el fragmento detenidamente hasta que capten, de forma general, todas sus peculiaridades. A Miguel Mercader no le van bien las cosas, anoche lo echaron e casa de doña Valentina por no comportarse con la debida corrección, eso es lo que dice doña Valentina, y esta tarde poco antes de la hora de cenar, serían como las nueve y media o diez menos cuarto, le partieron la cabeza en el tumulto que se organizó en la plaza de Santa Ana y lo que es peor Sin comerlo ni beberlo, a mí me gustaría saber quién me dio para apuntarme en los otros, ia esto no hay derecho! yo iba tranquilamente por la calle cuando se encontraron dos grupitos, se liaron a golpes, y a mí, que se conoce que me quedé en medio, me brearon, iqué tíos, qué forma de tirar coces! o que me gustaría es saber quién me dio para apuntarme en los otros, a Miguel Mercader cuando lo llevan al equipo quirúrgico no le hacen ni caso, hay mucho revuelo y mucho entrar y salir de guardias y de paisanos y no le hacen ni caso, la gente está nerviosa y aquello es un guirigay en el que nadie se entiende, Miguel Mercader sentado en un banco procura sujetarse la sangre con un pañuelo, soy periodista del Herald 30F Mercader sentado en un banco procura sujetarse la sangre con un pañuelo, soy periodista del Heraldo ¿puede. usted decirme cómo fue el atentado? , ¿atentado? pues sí atentado, ¿cómo uiere usted llamarle? , bueno, bueno… pues verá usted, yo iba tranquilamente por la calle cuando se encontraron dos grupitos… ¿dos grupitos? , si señor dos grupitos como de diez o doce personas cada uno, bien, siga, pues eso yo iba tranquilamente por la calle cuando se encontraron dos grupitos, se liaron a golpes y a mí que se conoce que me quedé en medio, me brearon, iqué tíos, qué forma de tirar coces! , pero bueno vamos a ver, ¿usted oyó los disparos? , ¿qué disparos? , hombre, no sé, isupongo que no serían los de la guerra de Manila! pues no señor, yo no oí ningún isparo, allí no hubo más que golpes eso sí muchos golpes, pero bueno, dígame una cosa, ¿dónde fue el suceso? , pues en la plaza de Santa Ana ¿no le digo? , ¿dónde quería usted que fuese? , el redactor del Heraldo vuelve la espalda a Miguel Mercader, ¿hay quien lo entienda? , las cosas no son de entender son de creer y cuando uno tiene la cabeza abierta y se sujeta la sangre con un pañuelo cree en casi todo. Camilo José Cela, San Camilo, 1936. Explicación de textos Ya hemos visto en unidades anteriores cómo se realizan dos de los grandes apartados de la explicación de textos: 1.

Resumen y tema 2. Disposición del texto Vamos a centrar nuestra actividad en otros dos: 3. Análisis de las características técnicas y lingüísticas del texto segun el tipo de escrito de que se trate. En este caso, aplicaremos este análisis a la narración PAGF40F escrito de que se trate. En este caso, aplicaremos este análisis a la narraclón. 4. Actitud crítica. Explicaremos, finalmente, cómo debe realizarse correctamente este apartado. (Recuerde que este es el último apartado de la disposición del texto. ) Actividades que podría proponer a sus posibles alumnos 1. Resumen del texto anterior. Deben precisar el tema o idea central. Disposición del texto. Deben analizar las partes que lo componen. 3. Análisis de las características técnicas y lingüísticas de la Nos permitimos señalarle algunas indicaciones que podría ir proporcionando a sus alumnos y ejercicios que podria proponerles. A. La materia narrada. El autor pretende narrar unos hechos con aires de verosimilitud y de la forma más atractiva posible, es decir, captando el interés del lector. Veamos cómo consigue ambas cosas: Consigue que su relato sea verosímil fijándolo en el espacio (Plaza de Santa Ana, calle, equipo quirúrgico) y en el tiempo (anoche, esta tarde, etcétera).

Haga que sus alumno comprueben en el texto ambos aspectos y señalen otra precisión temporal, importantísima, que hay en el texto. nseguirse también — Este deseo de verosimil’ filando de manera conoci los personales; es sea verosímil — Hay también en el texto otros rasgos que determinan el ambiente en el que se desenvuelve el relato y que ayudan de manera decisiva a su verosimilitud. Haga que sus alumnos los señalen y comenten algunos de los más significativos. (Deben tener en cuenta, especialmente, la segunda intervención del narrador-autor. El que narra debe captar el interés del lector o del oyente. Este aspecto lo consigue Cela en el texto por medio de la naturaleza de la acción (atractiva y actual) y por medio de la riqueza de la misma: la acción se desmiembra en cuatro apartados: — doña Valentina — el tumulto que se organiza lo que sucede en el equipo quirúrgico la aparición del periodista del Heraldo. Haga que sus alumnos comenten valiéndote de aquellos aspectos del texto que así lo determinen, los dos medios que utiliza Cela para captar el interés del lector: la naturaleza y la riqueza de la acción.

Esta variedad y movimiento de la acción confiere al texto un special dinamismo, característica propia de los textos narrativos. Este dinamismo se aprecia, asimismo, en la precisión con que el autor caracteriza al ambiente y a los personajes. Consiga que sus alumnos observen que los personajes no están en absoluto descritos, sino meramente presentados y que el ambiente del equipo quirúrgico es realmente frenético, un auténtico revuelo. Haga que sus alumnos comenten este aspecto del texto y señalen las frases o expresiones que ayuden a conseguirlo. B. El narrador.

Ya hemos analizado al prin idad la complejidad que principio de la Unidad la complejidad que ofrece el texto respecto e este apartado. La actividad de sus alumnos consiste ahora en que recuerden lo que apuntamos y lo pongan en práctica en el texto; es decir, que determinen perfectamente en el texto los tres puntos señalados, valiéndose de las frases, expresiones, cambio de persona gramatical, etcétera, que así los documenten. (No deben entrar ahora en detalles en cuanto a los tiempos verbales, porque este aspecto lo analizaremos posteriormente. ) C. Los procedimientos narrativos.

En realidad en los apartados anteriores ya hemos analizado dos procedimientos narrativos básicos: los procedimientos para la verosimilitud y el punto de vista. Veamos ahora cómo ordena el autor los hechos narrados y desde qué perspectiva los narra. Ordenación del relato. Realmente puede decirse que el texto presenta una disposición clásica (presentación, nudo y desenlace). Sin embargo, lo que nos interesa ahora es que sus alumnos determinen cómo se ordena el relato teniendo en cuenta los puntos de vista narrativos y el tipo de escrito que el autor utiliza para cada uno.

Deberán darse cuenta, entonces, que la ordenación del relato no es lineal, sino alterna. Debe usted hacer que comprueben todo lo que les decimos en el texto y deberán comentarlo ampliamente. — Perspectiva temporal. Sus alumnos deberán observar que el texto se construye en torno a dos ejes temporales, el del narrador-autor y el del narrador-protagonista, respectivamente: a) El narrador-autor nos cuenta unos hechos pasados, pero desde el presente; es decir, los actualiza como si estuvieran hechos pasados, pero desde el presente; es decir, los actualiza como si estuvieran ocurriendo todavía.

Con ello consigue acercar el relato al lector y captar mejor su interés. b) El narrador-protagonista, ya actualizado por el narrador-autor, (A Miguel Mercader no le van bien las cosas), cuenta su historia, tanto la primera (monólogo: a mí me gustaría… como la segunda vez (diálogo con el periodista: pues verá usted… ), desde el pasado. Sus alumnos deberán comprobar y comentar con tus propias palabras, valiéndote de ejemplos del texto, los dos ejes temporales desde los que se nos presenta la acción. D. Procedimientos lingüísticos propios de la narración.

Vamos a cerrar este apartado analizando las características lingüísticas de la narración. Centraremos nuestra atención en los aspectos más significativos. 1. El tiempo narrativo por excelencia es el pretérito perfecto simple, mientras que el que suele predominar en la descripción es el pretérito imperfecto. Sus alumno deberán determina a qué creen que se debe este uso. 2. La separación temporal establecida en el punto anterior no quiere decir que no puedan aparecer otros tiempos, incluso de manera general, en ambos tipos de escrito. En multitud de descripciones, aparece el presente como tiempo casi único.

Igualmente en la narració mos frecuentemente 80F con esta forma verbal par ector al lugar del suceso o el pretérito perfecto simple es un tiempo eminentemente narrativo y no aparecerá jamás en la descripción como forma verbal preferente. Como ejercicio podrá indicar a sus alumnos que Intenten describir u dormitorio utilizando el pretérito perfecto simple como forma verbal dominante y comprueben si les es posible. 3. Así como no es posible el uso del pretérito perfecto simple en la descripción, sí aparece frecuentemente en ella el pretérito imperfecto, tiempo eminentemente descriptivo.

Haga recordar a sus alumnos cómo comienzan cantidad de cuentos: Había una vez, érase una vez, etcétera. Esto demuestra que es un tiempo ideal para introducir el relato, para precisar algunos aspectos del mismo, para introducir aclaraciones al margen de los hechos narrados, etcétera. Haga que sus alumnos comprueben comenten el uso que se hace del pretérito imperfecto en el texto. A continuación, deben contar por escrito algo que les haya sucedido como si se lo estuvieran comunicando a un amigo y deben comprobar ellos mismos el uso que han hecho de los verbos.

Sus escritos pueden empezar así: Ajate lo que me pasó ayer. Iba yo tranquilamente por la calle cuando, de repente, vi que… 4. Otro hecho que suele caracterizar a la narración, frente a la descripción, es la escasa utilización del adjetivo. Sus alumnos deberán comprobarlo en el texto señalando los que encuentren. ¿A qué creen que se debe que en el texto solo aparezca un djetivo? (Deberán tener en cuenta sus conocimientos sobre la descripción, que han analizado en la Unidad anterior. ) 5.

Asimismo, y en relación do anterior, lo normal analizado en la Unidad anterior. ) 5. Asimismo, y en relación con el apartado anterior, lo normal es que la narración sea también más parca que la descripción en lo concerniente al uso de recursos expresivos. Sus alumnos deberán señalar los que encuentren y explicar la causa de esta diferencia entre ambos tipos de escrito. (Deberán tener en cuenta que los recursos que van a encontrar son los propios del estado e lengua que refleja el texto; es decir, de la lengua coloquial. Ejemplo: Le partieron la cabeza. ) 6.

Finalmente, en lo que se refiere al período sintáctico, la estructuración sintáctica de la narración suele ser más compleja que la de la descripción. Es normal que el período sintáctico descriptivo se caracterice por el uso de la yuxtaposición y de la coordinación, mientras que en el período narrativo juega un papel importantísimo la subordinación. Ello es debido, entre otras, a las causas siguientes: — Hemos definido la descripción como «una pintura hecha con palabras». Pues bien, en la propia definición tenemos ya la clave de su composición.

Es decir, cuando admiramos un cuadro, recibimos una impresión estética totalizadora de los elementos que lo componen y, posteriormente, observamos con detenimiento los detalles. Lo mismo sucede cuando leemos un fragmento esencialmente descriptivo. Sin embargo, tanto en uno como en otro caso, el resultado final se ha conseguido por medio de la acumulación de pequeños detalles (combinación de colores o una determinada disposición de los elementos lingüísticos). Esta caracterización general nos permite atisbar que el texto descriptivo es fu 0 DF 15