Juegos De Familia Jorge

Juegos De Familia Jorge gyJorgc31052C01 1 17, 2016 gpagcs Juegos de familia Por: Jorge Iván González Era el 31 de mayo de 1890, evoco aquella mañana cuando recibi el periódico. Con un des am anante encabezado, recuerdo que decla «Eleonor Willia Eleonor Williams ha s No le preste mucho tocaba mi puerta, en org to View lanaria riqueza de sesperante ruido ta que era E-leonor Williams, la madre de la difunta Eleonor Williams JR. enía a algo serio, gracias a su vestido de velo negro, estaba velando a su hija. Al dejarla pasar a mi casa le dije – le doy mi más sincero pésame , luego note que estaba desesperada por saber algo, no sabía que, pero se notaba al ver temblar su manos, le dije- debe estar algo cansada por favor siéntese – luego ella respondió – tiene una muy bonita casa detective Harrison- , sorprendido le respondi- gracias, pero usted como sabe mi nombre? , ella dijo – usted se ha hecho muy famoso en Liverpool, pero bueno cambiando de tema, vengo con una jugosa propuesta a cambio de que usted descubra el malviviente desalmado que ha asesinado a mi hija, el cual usted se acaba de informar por el periódico que sostiene n su mano derecha- , fruncí el ceño, dándome cuenta de en realidad estaba muy desesperada para que yo le resolviera el está muy desesperada en un tema que en el intento de olvidarlo intenta concentrase en otro más simple aun, para después estar un poco más tranquila.

Le dije -cuénteme que le paso-, ella desesperada por comenzar empezó a hablar rápidamente – era el 12 de noviembre del 1889, estábamos celebrando una cena gracias a que mi marido el Barón Pooler había cerrado un trato millonario, en el que mi hija no estaba de acuerdo, por la razón de que ella era ambientalista, e una mentalidad muy cerrada en el tema de los negocio, ella no sabía qué nos iba a beneficiar a todos los de la familia.

En fin el trato consistía en cavar una tierra la que se había descubierto había petroleo. Mi hija amenazo a su padre en hacer una huelga de hambre por una semana, evitando por cualquier costo que ese trato fuera cerrado. Mi esposo y yo sabíamos que ella no aguantaría dos días, y que además eran caprichos de adolescentes. También sabiamos que sus dos hermanos, Henry y George Williams (hermanos del Barón de Pooler) envidiaban a su hija por ser la heredera de nuestra fortuna. sada una semana la casa donde vivo olía a muerte y el color, la felicidad que antes brindaba mi hija ya no estaba, y mi esposo al enterase de que. Hola muy buenos días Dr. Harrison, como amanece en esta bella mañana- Dijo el Dr. Bush. – me excuso al interrumpir su charla con mi socio Señora Eleonor Williams-, la señora muy impresionada le pregunto – ¿ interrumpir su charla con mi socio Señora Eleonor Williams-, la señora muy impresionada le pregunto – ¿Usted como sabe mi nombre? , el Dr. Bush le respondido -solo una dama de su estrato es capaz de comprarse un vestido de 500 libras esterlinas el gran diseñador William Morris, ah y también valorado por 1020 libras esterlinas solo por la persona que lo lleva, en este caso usted -, la señorita sorprendida pero con aires de arrogancia dijo -no está a la venta señor, ah pero, ¿usted como sabe todo . el Dr. Bush dejo un largo lapso de silencio y se fue.

Después interrumpí y le dije —prosiga —, ella siguió contándome la historia, – mi esposo había encontrado a mi hija muerta, la ventana rota con un agujero de por medio, mi hija estaba tirada en el suelo, con seis intervenciones en todo su cuerpo, una en a cabeza, una en cada de sus manos y una en cada uno de sus pie, la otra era totalmente grotesca y vulgar, además de eso indignante, la otra estaba en su parte intima, además de eso estaba con un vestido de matrimonio que no recuerdo haberle comprado Al escuchar todas esas atrocidades, me sentí atemorizado ante el caso, entonces le dije -señora le voy a ser honesto por primera vez en mi carrera profesional le tengo miedo al caso-. Ella bajo su cabeza en un acto de tristeza y decepción, a la que en su acto la interrumpí -solo porque yo le tenga miedo al caso no tiene el significado de que no lo a interrumpí -solo porque yo le tenga miedo al caso no tiene el significado de que no lo vaya resolver- 2 días después… Llegue a la casa de Eleonor, situada en Liverpool, ahí es donde vivían lo jeques, barones e inversionistas de toda Inglaterra.

Cuando entre a la casa el esposo de la señorita Eleonor me miro con ojo de desprecio y cara de odio, pero al fin y al cabo no le di mucha importancia y seguí con el largo y bello recorrido por la casa que amablemente Eleonor nos había brindado a mi compañero y a ml Terminado el recorrido ella nos llevó a la puerta del lugar de os hechos, en ese instante escuche un disparo en la habitación del lado, mi corazón latía fuerte y rápidamente, decidí sacar mi revolver e ir averiguar qué había pasado, abrí la puerta lentamente y lo único que mi perímetro de vista podía ver era un rastro de sangre manchando la pared, cuando termine de abrir la puerta guarde mi revolver.

Y lo único que pude encontrar, era el cadáver del Barón poolery un arma en su fria y muerta mano, pero la puerta trasera estaba abierta, esto me generaba dudas sobre si él se había suicidado o lo habían matado pero el asesino ra demasiado astuto para hacernos creer que él se había suicidado. La señorita se inundaba en llantos gritando el nombre de su esposo. El arma que el sostenía era de referencia Remington 1887, algo viejo pero con clase, esa misma pistola se había convertido en mi pri referencia Remington 1887, algo viejo pero con clase, esa misma pistola se había convertido en mi principal pista hasta que encontré un tatuaje con una estrella diabólica que alrededor decía «SIC SEMPRE TIRANIS», era latín a lo que traducia en español «SIEMPRE A LA TIRANIA».

Esto me daba un leve escalofrió, aun mas así el caso me intrigaba. El Dr. Bush dijo -esto es diabólico, creo conocer la secta y su propósito, esta secta está comprometida en asesinatos de las bellas vírgenes de su locación, pero esta estrella me genera dudas, es algo diferente a las demás. -Vaya al grano Bush – exclame. —claro Dr. Harrison, la secta que le menciono se llaman los tiranos, obviamente renacidos por asesinatos selectivos y secuestro de vírgenes. A lo que Eleonor me miro con una cara de tristeza y melancolía, y nos dijo -entonces mi marido se acaba de ser asesinado por un cazador furtivo contratado por una secta haciéndonos creer que él se había suicidado-. El Dr.

Bush y yo la miramos con cara de intriga y sorpresa, al saber de su clara, efectiva e inteligente deducción, pero había dicho mucho, además aclaraba que él no se había suicidado si no que lo habían matado, esto me dio a entender que ella sabía específicamente lo que había pasado en esa habitación, pero lo pude aclarar ya que en ese momento dijo -vos scitis multa iam morior-, me asuste con lo que eso traducía «ustedes dos sabe mucho, deben morir ahora» , en es morior-, me asuste con lo que eso traducía «ustedes dos sabe mucho, deben morir ahora» , en ese instante Eleonor apuñalo a Dr. Bush con una daga de bolsillo que misteriosamente tenía el mismo símbolo de tatuaje que tenia el Barón pooler.

Después del acto salió a correr por los anchos pasillos de su casa, llegando a una habitación donde escondía un rifle Winchester «Trombón» del año 1890, anticuado, pero más potente que dos pistolas de duelo. Yo le grite – Porque Hace Esto!!! – , hubo un silencio donde solo se escuchaban los tiros que retumbaban en la pared donde yo estaba escondido. Al oír que Eleonor recargaba el arma decidi sacar mi revolver e ir por ella, que estaba en la otra habitación. La arrincone y le apunte, después le pregunte — porque hace esto-, ella dijo -oblationem pro te sacrificium homicida mí- que traduce «en nombre de mi lord te asesino ofreciéndote como sacrificio».

Cuando dijo eso apretó su boca haciéndola de ella salir una especie de espuma, así como la rabia de los perros, mientras hacía eso saco su pistola de duelo disparándome en todo el pecho mientras ella moría lentamente. Una semana después… Desperté en una camilla, en el hospital de Liverpool, sentía un dolor en el pecho a lo que el doctor me dijo – tu pecho a sido perforado por unas balas calibre 50, dale gracias al señor que inguna de esas balas toco tu corazón, bueno te dejare para descansar-. Al lado de la camilla est descansar-. Al lado de la camilla estaba la pistola de duelo la que habían usado para intentar matarme, también había una carta que decía: Dr.

Harrison posiblemente cuando lea esta carta yo ya esté muerta, bueno le cuento que la estrella que usted vio en la pistola de duelo sea la secta que usted tanto busca desenmascarar, pero usted debe tener la duda de ¿porque apuñale a su amigo y también porque lo intente matar. Usted ha sido un gran problema a la organización desde 1888, cuando usted mato a Jack el destripador, él era nuestro líder, se encargaba de traer las mejores vírgenes a nuestros sacrificios, gracias a él pudimos crecer como organización y evolucionar, cuando usted lo mato, la organización que a mi mando, jurando que algún día a usted lo íbamos a asesinar vengándonos y quitándolo del camino DR. Harrison, ah esa niña llamada Eleonor Williams era una pequeña trampa la cual no era mi hija, tampoco el Barón Pooler era mi esposo, yo fingí ser su esposa.

Todo esto fue fingido por dos propósitos, el primero matarlo a usted y el segundo ganar dinero, a que el Barón Pooler necesitaba 20 millones de libras esterlinas para excavar su terrltorio el cual tiene petróleo, así que nos vendió a su hija por aquella cantidad necesitada. Ah y otra cosa los hermanos del Barón Pooler también participaron en esto al igual que una «bruja». Estos tres hermanos del Barón Pooler también participaron en esto al igual que una «bruja». Estos tres personajes se encuentran en Vía Appia, Italia. Estaba desconcertado, todo esto era planeado, así que decidí vestirme y e ir a Italia. pero primero me devolví a la casa de Eleonor, cuando llegue a simple vista desde del portón las asa se podía ver toda quemada, fui a revisar si todavía estaba el DR. Bush ahí, donde lo deje después de que me dieran un tiro, cuando entre a la casa escuche —Auxilio, por favor-.

Se escuchaba desde el patio trasero al que me dirigi a investigar, decidí esconderme detrás de una pared que tenía un agujero por el que podía ver todo. Fue cuando observe una escena que jamás olvidare… vi a mi socio, y mi amigo, el Dr. Bush siendo brutalmente sacrificado por esta secta. No pude hacer nada ya, eran demasiados y lo peor es que no estaba psicológicamente preparado para enfrentar toda aquella escena de horror que abían vivido en ese momento. Me fui silenciosamente de la casa, huyendo como un cobarde sin esperanzas de hacer algo, hasta que recordé la carta de Eleonor, la cual decía que George y Henry Williams estaban en Italia, asi que me aventure en un viaje de donde sabía que podía vengar a ml amlgo.

Una semana después Conmigo me lleve un rifle de cazador, ya que los perpetradores de estos actos no eran más que animales, dispuestos a recibir un buen monto de dinero con tal de entregar a actos no eran más que animales, dispuestos a recibir un buen monto de dinero con tal de entregar a sus familiares. Llegue a Vía Appa donde los tales Henry y George estaban, cuando timbre en la casa de ellos Henry me abrió la puerta y yo inmediatamente le dispare dos tiros dejándolo como una inservible inmundicia en frente de la puerta, subí las escaleras con sed de venganza dispuesta a matar a quien fuera que se metiera en mi camino, pero recordé que la ira no era buena estrategia. Cuando me encontré con George cabalgando a la «bruja» les grite – sepárense asquerosos insectos, ustedes fueron los perpetradores del asesinato de Eleonor Williams JR y el Dr.

Bush-. Después de esas palabras los senté, los amarre de una silla a cada no, y luego los interrogue La «bruja» me dijo que había envenado el tiro que paso por la ventana rota de Eleonor JR, George me dijo que él había matado a su hermano y se había ido, también me dijo que Henry había puesto esas intervenciones llamadas estacas a su nieta Eleonor pero antes había disparado por la ventana para causar dudas. Bueno al final entregue a George y la «bruja» a las autoridades italianas, con el dinero que encontré en sus cajones (el pago que Eleonor Williams les dio a cambio de que hicieran ese crimen), me pude jubilar y dedicarme a escribir.