INSTITUCIONAL III CUENTO

INSTITUCIONAL III CUENTO gy majoimbachi012S cbcnpanR 15, 2016 4 pagos Todas las mañana solía llegar muy tarde, al entrar y mirar los carros debidamente parqueados, los arboles tan grandes con sus hojas tan verdes, las personas que llegaban corriendo igual que yo me generaba mas desespero por llegar a mi salón de clases. La universidad slempre fue el lugar más deseado, pero mi mal hábito de madrugar me convertía las mañanas en una completa angustia.

Este día no fue un día cualquiera ya que en la universidad teníamos el festival de literatura más importante del año y obviamente yo estaba inscrita para participar, al llegar a mi lase de derecho mis compañeros podían percibir las ansias que tenia de salir pues tenía mucho entusiasmo de ir a la biblioteca donde le daría el toque final a mi escrito.

Exactamente dieron en el reloj las 8:00 am me diri•a de forma veloz a la biblioteca, pero al llegar note qu ora caminaba de forma I to View que decidí ir a busca n 00 tiempo necesario al que me lleve al entra ue el bibliotecario r la puerta, por lo ntrar y dedicarle el pero vaya sorpresa más tarde y encontrar al chico que peor me caía, con mi libro Swlpe to vlew next page libro en sus manos. Juanito alimaña como todos lo conocíamos n la universidad era un chico mentiroso, manipulador, grosero, egoísta y para mi concepto fastidioso.

Evidentemente el encuentro no ocurrió de la mejor manera, fue lo más molesto y pensé que verlo allí había arruinado mi mañana y que sin duda así fue. Tome una silla e inicie a revisar mi escrito detalladamente, no quería que nada saliera mal para el festival. El tiempo empezó a transcurrir y mi paciencia empezó agotarse al ver que este personaje que tenía mi libro no le estaba dando una buena utilidad sino que estaba dedicado al chat de su celular y que al momento que notaba mi mirada fija en el fingía utilizarlo.

Pasaron alrededor de cuatro horas y el fastidioso de Juanito no regresaba el libro y fue allí donde mi paciencia culmina y debo aceptar que de manera un poco fuerte me acerque a preguntarle a qué hora pensaba desocupar el libro pues un toda la mañana no había hecho nada. Se inicio una discusión tan fuerte que el bibliotecario intervino pero la mentira y la manipulación de de este personaje no tuvo limite, aunque mi odiosidad y mi capricho no se quedo atrás.

Juanito argumentaba que necesitaría el libro hasta el día siguiente y que bajo ninguna circunstancia lo iba a ceder, la discusión se convirti l día siguiente y que bajo ninguna circunstancia lo iba a ceder, la discusión se convirtió en un verdadero conflicto ya que yo muy cautelosamente había reservado el unico libro de ese autor, el cual era el ideal para enriquecer mis ideas desde días anteriores y que por error del bibliotecario no podría tener mi historia a tiempo para el festival.

La impaciencia, la grosería y demás defectos salieron a relucir y Juanito y yo empezamos a insultarnos con palabras muy fuertes ya que este aun teniendo el conocimiento de mi situación y de que el libro estaba en sus manos por error no quería entregármelo.

Pasaron alrededor de os horas y las cosas se tornaban más oscuras y ninguna solución le encontrábamos a esa situación, pero ese momento tan fuerte cuando el bibliotecario con tantos años de experiencia y sabiduría encima suelta en llanto y nos pide que dejemos de discutir, que gracias a ese bochornoso escándalo en la biblioteca y a la falta de memoria que lo llevo a entregar el libro, podía costarle su puesto, ese sustento que alimentaba más que su cuerpo su alma y que lo hacía sentir más lleno de vida.

Juanito y yo nos miramos fijamente y nuestras actitudes bajaron a tal punto que la reflexión inundo nuestras mentes, pasaron unos egundos de silencio y lo único que mi cu 3Lvf4 que la reflexión inundo nuestras mentes, pasaron unos segundos de silencio y lo único que mi cuerpo me impulso fue abrazar al bibliotecario, pedirle disculpas y analizar el mal comportamiento que yo también adopte en ese momento, jamás pensé sentí un abrazo tan sincero por la espalda, ese Juanito que yo creía el ser mas fastidioso tenía un corazón bonito, un corazón noble y no me costó sino un minuto para percibirlo.

Nos levantamos y mutuamente nos disculpamos primeramente con el bibliotecario que habra tocado nuestras almas y luego el uno con el otro. De anera pacífica le pregunte si necesitaba el libro muy urgente y me dijo que tenía un trabajo sobre ese autor, entonces le propuse ayudarle a cambio de que me cediera el libro y le conté de mi participación en el festival.

Finalmente después de darle el toque final a mi escrito pensé lo equivocada que estuve al creer superficialmente que Juanito era una mala persona. El reloj marca las 7:10 pm y mi escrito está en manos de la directora, con mucha expectativa espero el momento que me llamen a darme la noticia si me lo aprobaron o no, mientras tanto termino de escribir estas líneas con la agradable compañía de Juanito. Fin