Indigenas jirajaras y caquetios

Indigenas jirajaras y caquetios gyyensyzambrano noq6pR 17, 2011 | II pagos Cuatro eran los grupos indigenas que poblaban en en la época del descubrimiento, el territorio Falconiano: Los Caquetíos, los Jirajaras, los Ayamanes y los Ajaguas. I Según el Obispo Ballesteros, la comarca de la Ciudad de Coro estaba poblada por catorce o quince mil indios… Los ‘Jirajaras» ocupaban las montañas al Sur de Coro. Los ‘]lrajaras’ era otro grupo indígena que ocupaba la zona de Falcón, al igual que los Ayaman y los Ajaguas (no mostrados en el mapa), los cuales no entendían el lenguage caquetío.

Sin embargo, todos ellos pertenecían a la gran familia linguistica Nuarhaca. Los mas numerosos al tiempo de la llegada de los españoles eran los Caquetios. Los Caquetíos, en cambio, emigraron hacia Aruba luego de frecuentes y constantes ataques por parte de los Indios Caribes, razón por la cual muchos sitios en Aruba tienen nombres caquetios. Los Caquetíos vivían La mayor parte de la habitaban en rancho cubiertos de ramas y PACE obre pilas en tierra. S»ipe to View los Caquetíos tacas y bejucos, s Caquetíos habían llegado a concebir y fabricar su propia vivienda, semejante a las ue aún se observan en el medio rural venezolano.

Los caquetíos vivían en villas o aldeas indígenas y para la construcción de sus viviendas, usaban materiales que ellos encontraban en su medio ambiente como palmas, lianas, troncos de árboles y hojas. Algunas de estas chozas podían que no tuvi SWipe page tuvieran ninguna pared. Eran construcciones de pilas y palillos con techos de palma trenzada. Los techos de palma trenzada facilitaban que cuando viniera la estación de mayor sequía las hojas se encresparan y formaran una clase de amortiguador que bloqueaba el calor del sol.

Asimismo, en la estación de lluvias, las hojas se ponían planas otra vez y se cerraban de tal forma que guarecerían de la lluvia. La única desventaja es que los techos tenían que ser substituidos a menudo. Graziano Gasparini (Templos Coloniales de Venezuela, página 19) afirma que «sea cual fuera la región donde vivieran nuestros aborígenes, existió una similaridad entre los sistemas estructurales y técnicos determinados por los materiales de recoleccion…

Las viviendas difieren entre si para adaptarse a las costumbres de las tribus, pero el resultado constructivo del interior y que oy genericamente definimos con el nombre de «rancho’. Así encontramos que en todas las construcciones excluyendo solo la región andina – es manifiesta la falta del muro, entendido como soporte del techo…. Tratase de viviendas de planta cuadrangular o circular es siempre una armadura de horcones, palos y viguetas, la que define el esqueleto estructural.

En realidad, los horcones son los que reciben la carga del techo, mientras que las paredes son de bahareque. Los palos se amarran medlante fibras vegetales o «bejucos», y luego se procede a cubrir el techo con hojas de palma o con paja. Nuestros aborigenes resolvieron sus problemas utilizando piedra, tierra, palos, bejucos, y paja». John Hemming señala resolvieron sus problemas utilizando piedra, tierra, palos, bejucos, y paja». John Hemming señala que cuando Federmann llegó a Barquisimeto desde Coro describió las viviendas de los Caquetíos en esta región como admirables… Las viviendas eran construidas una al lado de la otra, en línea, cerca de sus campos cultivados o cerca de los ríos»… de los cuales ellos obtenían los recursos necesarios para su alimentación y subsistencia. Algunas de las ldeas median hasta una milla, con una o dos calles y hasta 8 familias pod[an vivir en cada choza»… Hoy en día no existen viviendas indígenas como las que existian en esos tiempos, pero en algunas de las viviendas de comunidades indigenas remotas, donde las tradiciones han permanecido incambiables a través de Slglos, tienen un diseño y forma muy parecido a las primeras.

Petroglifos, son signos grabados en piedra, que fueron utilizados con mucha frecuencia en épocas prehispánicas, La palabra petroglifo quiere decir «piedra grabada». Los colores más comunes utilizados en los petroglifos eran el negro, blanco y arios tonalidades de ocre. Las teor[as de algunos Antropólogos argumentan que las grabaciones en estos petroglifos corresponden a manisfestaciones de tipo religioso, mientras que otros argumentan que pertenecen a manisfestaciones de tipo artistlco. ara nuestros caquetíos el uso de los petrogllfos señalaban los titulos de propiedad escritos sobre lajas de piedra con que se indicaba a otros el titulo de propiedad de la tierra cultivada por ellos. La pintura indígena, no solo estuvo conferi propiedad de la tierra cultivada por ellos. La pintura indígena, no solo estuvo conferida a los peroglifos. También se encontraba en cuevas en forma de pintura rupestre. Una muestra de pintura rupestre realizadas por los Arawak, de los cuales los Caquet(os eran descendientes. las puedes observar en este enlace de Aruba magazine (inglés):http://’mn. w. visitaruba. com/facts/general/ history. htm Para sus creaciones en alfarería o cerámica, nuestros aborígenes, utilizaban el material primario que les brindaba la naturaleza, ellos utilizaban el barro, y en el caso de los Caquetíos, por su concentración cerca de zonas costeras, también utilizaban caracoles como ornamentos y utensilios. Los Caquetíos, a fin e preparar sus alimentos y hacer fermentar sus bebidas de maíz, fabricaban de arcilla, ollas, cántaros y otros utensilios. La cerámica de los Caquetios no solo tuvo fines utilitarios sino también propósitos ceremoniales.

Gladys Nomland (citada por Alfred Kiddler en su libro Archaeology of Northwestern Venezuela. p. 78) , refiere que la Cerámica encontrada en el área de Falcón (especifícamente en Coro), clasificada según criterios de color y decoración, se basaba principalmente en utensilios de color marrón pulido. En Hato Viejo y La Maravilla (cerca de Urumaco), otros de los sltios estudiados, la mayoría e los utensilios encontrados, en cambio, eran de color rojo presentándose en diferentes variedades: rojo en terracota, rojo y negro sobre blanco, rojo en canela.

En Hato Viejo se encontraron utensilios de color marrón sobre crema. Por otra parte, canela. En Hato Viejo se encontraron utensilios de color marrón sobre crema. Por otra parte, en exploraciones llevadas a cabo en Hato Viejo, (situado al norte de Urumaco, cerca de la costa), La Maravilla (al noroeste de en Coro, específicamente al noroeste, hacia el área de los médanos, fueron encontrados materiales de lozas, cerámicas, urnas, y artefactos construidos e piedra y caracoles. (Archaeology of Northwestern Venezuela, Alfred Kiddler, p. 20).

Para el club de baloncesto, véase Guaiqueríes de Margarita. Los Waikeri, pertenecen a los grupos indígenas no clasificados científicamente. Según algunos especialistas, los Waikerl’ son de origen guarao. Alexander von Humboldt escribe en sus Viajes a las Regiones Equinocciales: ‘Los mismos waikeries dicen que su idioma y el de los guaraos están emparentados» . [1] Otros los consideran arawacos y otros, caribes, del grupo de los cumanagotos. Según afirman dichos estudiosos, estos grupos humanos se extend(an rimariamente desde la cuenca del Orinoco hasta el Noroeste de lo que hoy es Venezuela.

A la llegada de los primeros exploradores europeos, el gentilicio waikerí en su mayor concentración radicaba en las islas de Paraguachoa (hoy Margarita), Cua Hua (hoy Cubagua) y Cochen (hoy Coche), que conforman el Estado Nueva Esparta, así como en el norte del Estado Sucre, en lo que se conoce comoAraya. Los aborigenes waikeríes fueron los primeros pobladores en ubicarse en la actual Isla de Margarita, que originariamente fue denominada por estos como Paraguachoa, que han querido traducirla, ue originariamente fue denominada por estos como Paraguachoa, que han querido traducirla, sin base lingüistica alguna (Manzano y Manzano; 1. 50), como «abundancia de peces», pero que según los investigadores, es de mayor probabilidad que, como lo reflejan las raíces cumanagotas (Paragua: Mar; Choa: Gente), haya significado «Gente de la Mar» (Montenegro, 1. 983), pudiendo colocar como un defensor inocente al Fraile Francisco de Villacorta, quien en 1. 536 fundó en lo que hoy abarca las locaciones del Valle del Espíritu Santo y Porlamar, al «Pueblo de la Mar», por real comisión del Rey de España.

Según los describían los observadores durante la conquista, el aspecto de estos aborígenes era muy diferente al de la mayoría de las tribus caribes que se distribuían por el norte de Venezuela y las islas aledañas. Su estatura era superior a la media, llegando a describirse que los mismos podían llegar a alcanzar el metro con ochenta centímetros. Su tez era bronceada, con rasgos fuertes y pómulos resaltantes. Además de ello les era caracter[sticos una marcada fuerza muscular.

Y muy probablemente una de las características que les pudo haber granjeado la buena voluntad de parte de los Españoles, con especto a otras tribus, fue su hospitalidad y pacificidad, rasgo este que no los priva de haber sido un pueblo de excelentes guerreros, que se caracterizaban por su arrojo. En vista de esta actitud, fueron considerados por los reyes de España como vasallos libres, lo que legalmente impedía que se les esclavizara. Nunca fueron sometidos al régimen de la encomienda, ni le legalmente impedía que se les esclavizara.

Nunca fueron sometidos al régimen de la encomienda, ni les exigieron el pago de tributos. Los waiker(es eran excelentes pescadores, basando su economía y supervivencia (como aún hoy lo hacen los margariteños) rimariamente en esta actividad; también prácticaron la agricultura (muy probablemente con productos vegetales traídos de la tierra firme) aprovechando la fertilidad de los valles, como el de Arichuna (San Juan Bautista), Arimacoa (Tacarigua), Charaima (El Valle del Espíritu Santo), así como también de zonas como La Sabana de Paraguachí, La Mira, entre otras locaciones, para realizar sus cultivos.

Fueron diestros marinos, en sus marinerías, llegaron a alcanzar en sus praguas todas las costas del Oriente y Centro de Venezuela, así como también el río Orinoco, llevando cabo operaciones de trueque, con otras tribus venezolanas. Su gobierno era regido por Caciques como Charaima (su principal exponente), y también por Cacicas como «Isabel», madre de uno de los primeros mestizos de América, El Capitán Poblador Francisco Fajardo, verdadero primer fundador de lo que hoy es Caracas. Hoy día, la raza waikerí se halla en mezcla comun con la española y la negra, en muchos margariteños.

LOS INDIOS CARACAS, EL WARIAREPANO Y LA FAUNA Los primeros habitantes de El Ávila fueron los indios Caracas, de la familia Caribe. Estos indígenas tuvieron la dicha de disfrutar la Fauna existente en el parque El Ávila o Wariarepano, para ese entonces, muy abundante y variada, la mayoría se encontraba concentrada en la verti 1 concentrada en la vertiente norte del parque, por supuesto la zona menos visitada y en menor contacto por el hombre, se podía observar amplia variedad de especies animales, especialmente aves.

Entre los mamíferos estaba el tigrillo, el jaguar, el puma y el venado matacán, este último a punto de desaparecer víctima de la caza indiscriminada en nuestros dias, antes de que la zona fuese declarada parque nacional. Abundaba también el zorro guapán, la comadreja, el pícure, la ereza, la ardilla, el puercoespín, el conejo de monte, el mono araguato, el cachicamo, el rabipelado. el váquiro, perezas, rabipelados, ardillas y algunos ratones silvestres. Los Maquiritare (también transliterado como Makiritare) son un pueblo indígena de la familia Caribe. En su lengua, los maquiritare se denominan «Yekuana».

Es un pueblo de navegantes fluviales que se ha establecido en diferentes margenes de los ríos tributarios del Orinoco. Ocupan actualmente un territorio de cerca de 30. 000 km2 en los estados Bolívar y Amazonas de Venezuela y el norte de Brasil. Este territorio incluye el Parque Nacional Jaua-Sarisariñama. Actualmente se estima su población entre 5. 000 y 10. 000 habitantes. FolkloreSu folklore está íntimamente relacionado con la cultura indígena siendo las danzas y cantos nativos, con música tocada con instrumentos típicos de las etnias, tales como los de viento y percusión, las expresiones más importantes en el estado.

Municipio Autónomo Alto Orinoco Danzas Típicas: Se celebran a todo lo importantes en el estado. Municipio Autónomo Alto Orinoco I Danzas Tipicas: Se celebran a todo lo largo y ancho del municipio, on danzas típicas de los Yanomamis y Yekuanas (Maquiritares) que realizan en honor a un DIOS o por agradecimiento a acontecimientos favorables. Las fechas son movibles. Municipio Autónomo Atures Baile del Sebucán: es una manifestación que tiene lugar en las Comunidades indígenas y en la ciudad de Puerto Ayacucho.

Se baila con varias cintas de diferentes colores, unidas en la punta de un palo grueso, que mediante el son de un baile típico se va tejiendo hasta llegar a la parte baja del palo y termina el baile. La Mascara: En esta fiesta sagrada, organizada por el shaman de la comunidad (médico brujo), lamada itsuwude. En una churuata reservada para los espíritus invitados, se preparan los Piaroas para recibir y representar a los espíritus de los antepasados en su propio cuerpo, ellos son los warimes, hombres vestidos de báquiro.

Se celebra en casi todas las comunidades Piaroas del Estado, sobretodo en el Municipio Atures, en los meses de noviembre y diciembre; con motivo de matrimonios, una buena cosecha. Danzas del Warime: Se lleva a cabo en la cuenca del Río Cataniapo y en comunidades de Alto Carinagua. Es un baile donde participan hombres, mujeres y niños, vestidos con trajes típicos elaborados con fibras de ortezas de árboles y mascaras de gran vistosidad, toman bebidas típicas fermentadas como el Yaraque (jugo de yuca fermentada).

Se realizan cuando se va a llevar a cabo un matrimonio, por la buena cosecha, fermentada). Se realizan cuando se va a llevar a cabo un matrimonio, por la buena cosecha, porque se inicia un shaman (médico brujo) u otro acontecimiento de igual importancia. GastronomíaLos platos están elaborados en su mayoría a base de pescado de río. Entre los platos más conocidos están la Catara, Kepeurí RÍO Negrero, Yereque. Cuaja yare: Sopa creada por la amilia Mayuare de Puerto Ayacucho, contiene pescado asado, ají picante y sal.

Su elaboración consiste en llenar un recipiente de agua casi hirviendo, se echan trozos de pescado previamente asado, picante (murupi, chirel o simplemente ají picante). Se sirve con casabe o mañoco. Se consume en Comunidades indígenas. Pescado asado en leña: Comida típica de las Comunidades Indígenas Piaroa, JIVi, Baré, entre otras. Consiste en pescado, hojas de topocho y sal. Se prepara el pescado con sal, relleno de orégano, cilantro; se envuelve con la hoja de topocho y se coloca sobre la troja en el fogón (parrilla). Se acompaña con casabe o mañoco mojado, ají picante o catara.

Se puede conseguir en las diferentes comunidades indígenas. Yucuta: Mañoco (fibra de la yuca preparada) comida típica de las Comunidades indígenas Piaroa, Jivi, Baré, entre otras, la preparación consiste en colocar en un recipiente con agua fría o fresca se vierte el mañoco y se toma como jugo (sirve de acompañante del pescado asado y del cuaja yare). Yaraque: Mañoco o casabe (fibra de la yuca preparada) Bebida propia de las Comunidades indígenas Piaroa, Jivi, Baré, entre otras. Su preparación consiste en colocar en un recipiente gra