Estilos Educativos Parentales e implicación en trastornos

Estilos Educativos parentales y su implicación en diferentes trastornos 2009 – 2010 Experto en Terapia Infantil y juvenil 7 10 11 María Jesús Jiménez ndice ÍNDICE . 2 INTRODUCCION . 3 ESTRATEGIAS DE SOC FAMILIAR OF p DIFERENTES VISIONES DE LOS ESTILOS PARENTALES A LO LARGO DE LA HISTORIA.. CLASIFICACION DE LOS ESTILOS EDUCATIVOS PARENTALES — 5 INVESTIGACIONES QUE RELACIONAN LOS ESTILOS PARENTALES CON EL AJUSTE INFANTIL,’ADOLESCENTE.. 7 DIANA BAUMRIND, 1971 – ESTUDIO LONGITUDINAL REFORMULACIÓN DE MACCOBYY MARTIN, 1983 .

LAMBORN, MANTS, STEINBERG Y DOURNBUSCH, 1 ggn OTROS ESTUDIOS: HOFFMAN, 1970 – KELLERHALLS Y MONTANDON, 1997 EL ESTILO EDUCATIVO PARENTAL Y EL TOC PAUTAS PARA PADRES 24 INFANTIL — 26 . 20 22 EL ESTILO EDUCATIVO PARENTAL Y LA AGRESIVIDAD PAUTAS PARA PADRES — — . 28 CONCLUSIONES 29 BIBLIOGRAFÍA 31 Introducción La familia es el contexto donde se van adquiriendo los primeros hábitos, las primeras habilidades y las conductas que nos acompañarán a lo largo de nuestra vida.

Los adultos que le rodean tienen un papel muy importante en la socialización de los niños, pero esta influencia no es decisiva, ya que la educación no es un proceso unidireccional, sino un proceso en el que influyen múltiples factores. En palabras de Rich Harris, «la educación no es algo que los padres hagan a los hijos, sino algo que padres e hijos hacen conjuntamente» (Rich, 2002, 53). Los estilos educativos son ctuar de los adultos 33 respecto a los niños en su límites que serán el referente de los menores.

Esto hace que sea de gran importancia desarrollar programas de educación para padres que, en algunos casos, supongan cambios en la forma de educar, en la manera de establecer límites y en la atención que se presta a los hijos. Estrategias de socialización familiar Llamamos estrategias de socialización al conjunto de conductas que los padres valoran omo apropiadas y deseables para sus hijos, tanto para su desarrollo como para su integración social.

Podemos clasificar estas estrategias en función del tono de las siguientes variables: Tono de la relación Afecto-HostiIidad Aceptación-Rechazo Nivel de comunicación Calor-Frialdad Proximidad-Distanciamiento Autonomía-Control Conductas para encauzar el Flexibilidad-Rigidez comportamiento Permisividad-Restricción La combinación de estas variables dará lugar a los diferentes estilos educativos. 33 Diferentes visiones de los tales a lo largo de la fundamentales en las estrategias de socialización familiar: Aceptación: continuo que abarca desde la implicación positiva y el centrarse en el hijo hasta el rechazo y la separación hostil.

Control firme: con diferentes grados, como el refuerzo, la ausencia del mismo, la disciplina laxa o la autonomía extrema. Control psicológico: continuo que va desde la intrusión, el control hostil y la posesividad hasta la retirada de la relación. Con el paso del tiempo, estas dos dimensiones se han diversificado, y actualmente son cuatro los aspectos de las conductas de los padres que se tienen en cuenta, a saber, el afecto en la relación, el grado de control, el grado de madurezy la comunicación entre adres e hijos.

Coloma (1993) habla de variables similares, y las enmarca en los siguientes extremos: Control firme Cuidado/EmpatÍa Calor afectivo Disponibilidad hacia los hijos Comunicación paterno filial bidireccional Comunicación paterno filial abierta Control Laxo Rechazo/lndiferencia Frialdad/HostiIidad Ausencia de disponibilidad Comunicación paterno filial unidireccional Comunicación paterno filial cerrada 4 4 33 Clasificación de los Estilos arentales comportamiento de los padres de forma decisiva. Se incluye también los efectos educativos que estos rasgos de conducta suelen tener sobre los hijos.

Tipología de socialización amiliar Rasgos de conducta parental Consecuencias educativas sobre los hijos DEMOCRÁTICO AUTORIZATIVO Afecto manifiesto. Sensibilidad ante las necesidades del niño: responsabilidad. Explicaciones. Promoción de la conducta deseable. Disciplina inductiva o técnicas punitivas razonadas (privaciones, reprimendas). Promueven el intercambio y la comunicación abierta. Hogar con calor afectivo y clima democrático. Competencia social. Autocontrol. s 3 castigos, toleran todos los impulsos de los niños. Especial flexibilidad en el establecimiento de reglas.

Acceden fácilmente a los deseos de los hijos. No implicación afectiva en los suntos de los hijos. Dimisión en la tarea educativa, invierten en los hijos el menor tiempo posible. Escasa motivación y capacidad de esfuerzo. Inmadurez. Alegres y vitales. Baja competencia social. Pobre autocontrol y heterocontrol. Escasa motivación. Escaso respeto a normas y personas. Baja autoestima, inseguridad. Inestabilidad emocional. Debilidad en la propia identidad. Autoconcepto negativo. Graves carencias en autoconfianza y autorresponsabilidad. Bajos logros escolares. Escasa competencia social.

Bajo control de impulsos y agresividad. Escasa motivación y capacidad de esfuerzo. 6 33 conductas exploratorias. Estructura II: eran medianamente confiados y capaces de controlarse a sí mismos y, en cierto modo, inseguros y temerosos. Estructura III: se manifestaban inmaduros y dependientes, con menos capacidad de control y confianza en si mismos. Correlacionando estas características de personalidad con los métodos de crianza en la familia, obtuvo lo siguiente: Padres del grupo (especialmente las madres). Ejercían un control firme, exigencias de ciertos niveles de madurez y buena comunicación con los hijos.

Lo denominó comportamiento autoritativo parental. Padres del grupo II. Menos cuidadosos y atentos con sus hijos en comparacion on otros grupos. Son denominados padres autoritarios. Padres del grupo III. Afectuosos y atentos, pero ejercían poco control y escasas 7 33 demandas de madurez so Los denominó padres papel subordinado y en restringir su autonomía. Se esfuerzan en influir, controlar y evaluar el comportamiento de sus hijos en función de unos patrones rígidos. No facilitan el diálogo, e incluso llegan a utilizar el rechazo como medida disciplinaria.

Este estilo es el que tiene más repercusiones negativas en el desarrollo de los hijos, puesto que muestran falta de autonomía personal y creatividad, menor competencia social, baja autoestima y genera iños descontentos, reservados, poco tenaces, poco comunicativos y afectuosos y con tendencia a tener una pobre interiorización de valores. Padres permisivos: dotan al menor de gran autonomía, siempre que no esté en peligro su integridad física. Se comporta de una forma afirmativa, aceptadora y benigna hacia los impulsos y las acciones del niño.

Lo libera de todo control y evita utilizar la autoridad, las restricciones y el castigo. No son exigentes en cuanto a la madurez y responsabilidad en las tareas. El problema viene dado porque los padres no son siempre capaces de marcar límites en la permisividad, udiendo llegar a producir efectos socializadores negativos en cuanto a conductas agresivas y logros de independencia. Tenemos a niños aparentemente alegres y vitales, pero dependientes, con altos niveles de conducta antisocial y bajos niveles de madurez y éxito personal. denomina «Reciprocidad jerárquica», es decir, cada miembro de la familia tiene derechos y responsabilidades con respecto a los demás. Se caracteriza por la comunicación bidireccional y por el énfasis entre la responsabilidad social de las acciones y el desarrollo de la autonomía e independencia en el menor. Este estilo produce, por regla general, efectos ositivos en la socialización: desarrollo de competencias sociales, elevada autoestima y bienestar psicológico, así como un nivel inferior de conflictos entre padres e hijos.

Estamos hablando de niños interactivos, hábiles en las relaciones con los iguales, independientes y cariñosos. Las conclusiones obtenidas por Baumrind indican que, si se prestan atenciones y cuidados a los niños en edad preescolar y se exigen ciertos niveles de control, se fomenta en los niños madurez y competencia. Esto no se consigue si se utiliza una disciplina autoritaria, severidad en los castigos, abundantes restricciones o sobreprotección.

En 1977 se entrevistó a los mismos niños, con edades en torno a los 8 0 9 años, y se pudo observar que los hijos de familias democráticas tenían elevadas competencias sociales y cognitivas, los hijos de familias autoritarias tenían un nivel medio, y se encontraban los niveles más bajos en los hijos de familias permisivas. Estos resultados se mantuvieron en la adolescencia. 9 objetivos, y el grado de afecto o sensibilidad de los padres ante las necesidades de sus hijos, principalmente en el terreno emocional. Con la combinación de estas dimensiones en sus diferentes grados, se obtienen cuatro estilos parentales diferentes:

Reciprocidad. Implicación afectiva No reciprocidad. No implicación afectiva Control fuerte Autoritario – Recíproco Autoritario — Represivo Permisivo – Indulgente Permisivo – Negligente Lamborn, Mants, Steinbergy Dournbusch, 1 991 En 1991, Lamborn, Mounts, Steinberg y Dournbusch realizaron un estudio con adolescentes de entre 14 y 18 años, a los que clasificaron en función de los cuatro grupos de estilos parentales definidos por MacCoby y Martin, en función de las variables de desarrollo psicosocial, logro escolar, destrezas interiorizadas y conductas problemáticas. 0 DF 33 Los resultados que obtuvi stras que los