EN OCASIONES NOS HACEMOS PREGUNTAS

EN OCASIONES NOS HACEMOS PREGUNTAS ay BELISAR1050T0123 17, 2016 2 pases EN OCASIONES NOS HACEMOS PREGUNTAS Hay preguntas de gran importancia para el ser humano: aquellas que tienen que ver con el sentido de la vida, con el alma, con Dios, con la muerte Generalmente, cada uno de nosotros se forma algunas ideas al respecto, además de reconocer doctrinas ya existentes que asumen una posición definida. Algunos piensan que hay vida después de la muerte, mientras que otros afirman lo contrario. Por su parte, otros dicen que el problema no es la muerte, sino el modo de asumirla.

En relación con la existencia del alma, unos piensan que ella no es sino el conjunto de n PACE 1 ora este modo una postu m es algo por sí misma, depê por explicaciones de está más allá de lo fís icas, adoptando de ensan que el alma po, tomando partido ecir, aquello que En cuanto a la valoración de la vida, hay quienes la consideran carente de sentido, mientras que otros la afirman incondicionalmente, pese a todas las vicisitudes por las que atraviesen los individuos. Para algunos filósofos, este tipo de consideraciones excluyentes entre sí, no son necesariamente irreconciliables no ontradictorias.

Ante la incertidumbre de este mar de opiniones, es natural preguntarnos ¿qué postura asumir, quién tiene la razón y por qué? ; ¿Es posible resolver estos interrogantes? ¿Cómo debemos enfrentarnos a ellos? La filosofía no pretende dar respuestas acabadas, pero tampoco permanecer en un una constante divagación. Lo fundamental es que cada pregunta surja de un deseo de saber y que permita esclarecer los problemas esenciales a la vida y al hombre. Así la vida adquiere un sentido desde las preguntas que nos formulamos. ¿por qué se hace filosofía?

Hemos hablado sobre cómo en ocasiones nos vemos convocados a abordar y a responder preguntas esenciales. La filosofía se origina cuando estas preguntas fundamentales se tornan ineludibles, esto es, cuando en lugar de esquivarlas perdiéndonos en las ocupaciones cotidianas, nos cuestionan en toda la magnitud de sus problemas. Estas preguntas nos dirigen su llamado. En cierto modo, somos llamados por ellas y requeridos por la tarea de pensamiento que exigen Pero la filosofía no se agota en el llamado que viene hacia nosotros desde ese fondo de interrogantes propios del individuo.

La filosofía es posible allí donde correspondemos expresamente a la vocación de este llamado. De este modo, la filosoffa supone siempre una disposición, un temple de ánimo peculiar en virtud del cual prestamos ordos y acogemos lo que nos reclama. Llega a filosofar quien se dispone y recibe las preguntas fundamentales como su más Íntima pertenencia, y quien se confía desinteresadamente a la tarea de su resolución. Tu opinión De las siguientes preguntas filosóficas cuáles tienen importancia para ti: Qué es la verdad? Qué sentido tiene la vida? Dios Existe? Qué es la libertad? Cómo aprender a vivir?