By El evangelio del día (domingo 7 de febrero de 2016) Evangelio según San Lucas 5,1-11 En una oportunidad, la multitud se amontonaba alrededor de Jesús para escuchar la Palabra de Dios, y él estaba de pie a la orilla del lago de Genesaret. Desde allí vio dos barcas junto a la orilla del lago; los pescadores habían bajado y estaban limpiando las redes. Jesús subió a una de las barcas, que era de Simón, y le pidió que se apartara un poco de la orilla; después se sentó, y enseñaba a la ultitud desde la barca.
Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: «Navega mar adentro, y echen las redes». Simón le respondió: ‘ ora no hemos sacado na pe Así lo hicieron, y saca n taf estaban a punto de r Entonces hicieron se do la noche entera y haré las redes». e p s, que las redes la otra barca para que fueran a ayudarlos. Ellos acudieron, y llenaron tanto las dos barcas, que casi se hundían. Al ver esto, Simón Pedro se echó a los pies de Jesús y le dijo: Aléjate de mí, Señor, porque soy un pecador».
El temor se había apoderado de él y de los que lo acompañaban, por la cantidad de peces que habían Swlpe to vlew next page recogido; y lo mismo les pasaba a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, compañeros de Simón. Pero Jesús dijo a Simón: «No temas, de ahora en adelante serás pescador de hombres». Ellos atracaron las barcas a la orilla y, abandonándolo todo, lo slguleron.
Reflexión: En primer lugar notamos la misericordia del Señor Jesús al ayudar que los humildes pescadores que no habían pescado nada, para que pudieran obtener una gran pesca que les ayudaría grandemente, porque era su fuente de ingreso. En segundo lugar notamos como el Señor escogió hombres humildes que aunque no poseían grandes conocimientos, eran importantes para su obra redentora. Libros del Nuevo Testamento, cantidad de capítulos y versículos Libro Capítulos Versículos San Mateo 28 1071 San Marcos 16 678 San Lucas 24 1151 San Juan 21 879 Hechos 1007
