Biografias

Georges-Auguste Escoffier (Villeneuve-Loubet, Francia, 1847 – Montecarlo, Mónaco, 1935) Cocinero y gastrónomo francés. Aprendió el arte culinario en un restaurante de Niza propiedad de su tro, donde entró a trabajar a la edad de trece años. Alcanzó gran notoriedad en las ciudades de París y Cannes, donde, en su tiempo, se concentraba la alta sociedad francesa e internacional. Durante la guerra franco-prusiana de 1870, dirigió el servicio de cocina del mariscal Bizaine, y luego el del emperador alemán Guillermo II, quien le otorgó el título de «emperador de los ocineros».

En 1890 se trasladó a Londres para ponerse al frente de la cocina del presti ioso hotel Savo de la del hotel Arlton en 1898. OF3 e ar el melocotón Entre sus creaciones Svipe nextp Melba y los filetes de nguad sus obras de divulgac uan amplia difusión y otra parte, entre 934) ha conocido . ambién son de su autorra La guía culinaria (1903), una de las primeras obras dedicadas a la alta cocina que mantiene su vigencia en el panorama gastronomico internacional, El libro de los menús (1912) y El arroz (1927).

Escoffier fue uno de los chefs ue consolidó el prestigio internacional que la cocina francesa ha adqui adquirido en la era moderna. Guillaume Tirel Fue aprendiz de cocina de Jeanne de Évreux, chef del rey Felipe de Valois y el duque de Normandía, primer cocinero y sargento de armas de Carlos V y primer caballero de cocina del rey. En el año 1381 entra al servicio de Carlos VI como primer caballero de cocina del rey al cual servirá hasta el año 1392 en el que se convierte: Maestre de las guarniciones de cocina del Rey (Maistre des garnisons de cuisine du Roi).

Murió en el año 1395 y su tumba es visible en el museo de Saint- Germain-en-Laye. François Villon immortalizó a este gran cocinero francés con dos frases: «Si allé veoir en Taillevent Au chapitre de fricassure». Taillevent es también el nombre de un restuarante prestigioso parisiense. Marie-Antoine Carême nació en una numerosa y pobre familia, de alrededor de veinticinco hermanos. Su padre, estibador en el río Sena en parís, decidió abandonarlo a la edad de diez años, explicándole la dificil situación de la familia y animándolo a salir adelante.

Durante se dia el pequeño Antoine vagó por las calles hasta dar con la taberna «La Fricasé de Lapin», en la cual el dueño se apiadó de él y le ofreció ser ayudante de cocina. A la edad de 16 años, en 1799, abandonó la taberna y entró a trabajar en «Chez Bailly», cuyo propietario, del mismo nombre, era un importante pastelero de París. Al ver el entusiasmo de C propietario, del mismo nombre, era un importante pastelero de parís.

Al ver el entusiasmo de Carême por la cocina, Bailly le dio la oportunidad de que, en los ratos que tuviera libres, se dirigiera la Biblioteca Nacional a aprender más, no solo sobre cocina, sino también de arquitectura. El joven Carême aprendió a leer en su esfuerzo por comprender los libros. Poco a poco se fue descubriendo otro gran talento del pastelero: su arte de dibujar. Y trasladó, as(, sus dibujos de arquitectura a sus pasteles de azúcar, dejando a todos asombrados con sus invenciones. «Chez Bailly» adquirió gran fama gracias a ellos, apareciendo pedidos de todo el mundo por sus asombrosos trabajos.

Fue cocinero de (Napoleón I), desarrolló los fiambres y las presentaciones de mesas de uffet. En 181 5 trabajó para el zar Alejandro I de Rusia, y en 1816 para el futuro rey de Inglaterra, Jorge IV. En 1821 fue contratado por el príncipe Esterhazy, embajador austriaco en Paris, a cuyo servicio permaneció hasta 1823, fecha en la que pasó a trabajar para el barón Rothschild y su familia, hasta 1829, cuando se retiró y dio por terminada su carrera, dedicándose de lleno a su obra literaria. En 1833 murió mientras, ya muy enfermo, enseñaba a uno de sus alumnos a corregir los errores de un plato de albóndigas. 3 DE 3