Anthea

Anthea gy BellaCorIet02345 1 $eopa,1R 16, 2016 pagcs Yo no creía en el destino, en las cartas, tampoco en las bolas de cristal. No creía en la magia. Pero pronto me di cuenta de mi error. Que ése mundo mágico si existía, que yo no era común y corriente como había pensado toda la vida. Era mi cumpleaños número 18, la noche era fría y las nubes cubrían las estrellas. Estaba afuera de mi casa, cuando todos mis invitados estaban en la sala, viendo el vacío sin esperar que nada apareciera, o puede ser que en mi interior si esperaba lgo.

El viento empezó a mover las ramas de los árboles con furia, estaba un poco asustada de como pronto la noche cambió drasticamente. Sent[a que algo me observaba, que me llamaba. Voltee a ver y no había nadie en la oscuridad. Regresé adrento y fui directo a mi cuarto. Algo había cambiado, mi cama estaba algo torcida y detrás de ella había una uerta de un color que to page nisiquiera sé SI existe ora aun así no grité, algo Sv. ipeto ella.

Me acerqué lent ente a me asusté pero , algo me atraía a cerrada. Cuando llegué estaba ligeramente abierta, la abrí con lentitud, y en fondo se escuchaba como susurraban mi nombre. Entré a la puerta y conducía a un gran túnel, como cualquier persona curiosa, me adentré un poco y vi como la puerta se cerraba lentamente. Ya no había vuelta atrás. Llegué al final de túnel y me encontré un bosque enfrente, similar al que estaba en mi casa. Un poco más adelante estaba un muchacho con una capucha verde.

El muchacho era muy guapo, no se parecía a nadie que haya conocido antes, sus rasgos eran finos pero a la ez muy varoniles, era delgado pero podía notar su musculatura, su pelo era negro como el carbón y sus ojos eran grises, su piel era pálida y se le notaban las venas azules. Se acercó lentamente sin decir ni una palabra, yo con algo de intriga quise avanzar unos pasos pero mi cuerpo no reaccionó como esperaba y retrocedí con los ojos bien abiertos para ver que estaba pisando. -No tengas miedo- susurró -¿Por qué debería tener miedo? Sólo tendría miedo si sintiera que me lastimarías -Entoces, ¿Por qué retrocedes? o deberías retroceder si no tienes miedo – Tienes razon lastimarías – Tienes razón, pero creo que tu reaccionarías de la misma manera que yo lo hago en este momento, si hace un par de minutos atravezaste por un túnel que apareció detrás de una puerta mágica que apareció en tu habitación misteriosamente. -Tú debes ser April, soy Ash -¿Cómo sabes mi nombre? -Todos aquí saben tu nombre, la directora esta esperando tu llegada Miré a mi alrededor buscando una escuela pero todo lo que veía ra bosque por todos lados, todo estaba repleto de verde. Yo no miro alguna escuela por aquí sólo veo el bosque -Obvio boba, la escuela esta escondida tras unas cercas mágicas -Okay quiero que me digas donde me encuentro y ¿Por qué estoy aquí? – Eso no te lo puedo decir yo, solo la directora, sigueme Lo seguí sin saber si debía confiar en él. El bosque parecía interminable, aquí el tiempo no corría como deber(a ser, sentía que había estado aquí toda un vida. Al final llegamos a un portón dorado, se abrió magicamente. 31_1f3